Avilés (E.P.).-La Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente ha anunciado este sábado la imposición de sanciones a varias empresas que realizan operaciones con graneles en el puerto de Avilés, por incumplimiento de la normativa referente a la contaminación del aire.

   Así lo ha comunicado la Consejería de Medio Ambiente en una nota de prensa en la que ha emplazado a la Autoridad Portuaria de Avilés "a que realice un seguimiento más exhaustivo y se adopten de inmediato las medidas necesarias para evitar las emisiones de partículas en las operaciones que las empresas realizan con los graneles".

   El próximo miércoles está prevista una reunión en la que se exigirán explicaciones al puerto y las actuaciones para evitar que estos problemas se repitan.

   Según ha explicado la Consejería, los guardas del Servicio de Control Ambiental han realizado durante las últimas dos semanas labores de inspección en la zona portuaria ante los elevados valores de partículas registrados en la estación de Las Arobias (Matadero). En ellas "se han constatado incumplimientos de las condiciones que las empresas tienen fijadas en su autorización ambiental, como la escasa humectación de los graneles, que constituye un factor crítico para evitar las emisiones de polvo a la atmósfera, especialmente en días secos", ha informado en la nota.

   En consecuencia, el Principado ha decidido "sancionar a las empresas infractoras en lo relativo a las prácticas de operación inadecuadas o deficientes".

   Además, Medio Ambiente tiene en curso la revisión de las  autorizaciones ambientales integradas de ArcelorMittal, Saint Gobain, Asturiana de Zinc y Fertiberia, con el fin de establecer nuevos límites de emisión e inmisión, no sólo para las partículas, sino para otros contaminantes como el benceno y compuestos que produzcan malos olores.

   La consejera de Medio Ambiente, Belén Fernández, ha advertido de que "no son tolerables situaciones de mala calidad del aire que podrían evitarse si las operaciones cumplieran las exigencias del Principado, unas condiciones que deben cumplirse a  rajatabla".

   Medio Ambiente tampoco descarta, si fuera necesario, "reforzar las condiciones impuestas en las autorizaciones de actividades potencialmente contaminadoras de la atmósfera".