Alberto Aparicio/Marraquesch.-Las palabras son incapaces de describir la emoción que todos los participantes de Clio Raid Marrakech by Bathco sintieron ayer en el Día Solidario. En total, casi 2 toneladas de material humanitario transportados en los pequeños y robustos Clios, fueron entregados a las puertas del desierto, en un poblado formado en los años 70 por antiguos esclavos del África Negra y bereberes.
Los Gnawas, como se les conoce, no tienen gran cosa, pero aún así prepararon una especial bienvenida para los participantes del viaje de aventura, a los que estaban esperando con los brazos abiertos. Y los equipos respondieron. Y superaron todas las expectativas. Artículos de salud, ropa de abrigo, calzado, material escolar y muchos juguetes fueron entregados a las familias de un poblado se entregó en cuerpo y alma a Clio Raid y en el que los niños participaron de forma muy activa en los juegos familiares que, cariñosamente, fueron denominados Olimpiadas Solidarias. Se disputaron varias pruebas, a cual más divertida: Carreras bereber, en la que un participante y un niño corrían atados por una pierna; Carrera de Dromedarios, con el niño aen la espalda; y se terminó con un partido de fútbol. Al final, quedó demostrado que en todos estos juegos ganó la solidaridad.
Pero además, hay que destacar que el equipo vasco-navarro formado por Javier Robles y Karim Kharrat (oftalmólogo) graduaron la vista a casi 80 personas, niños y adultos, a los que, además, les regalaron las gafas con su graduación, haciéndoles que, a partir de ahora, su vida sea un poco mejor. Estuvieron toda la tarde en el poblado y su gesto fue premiado con una sonora ovación al llegar al campamento.
Por último, gracias al patrocinio de las acciones solidarias por parte de la Organización Impulsora de los Discapacitados (O.I.D.), se donaron 1.000 euros para ayudar al poblado a escolarizar a sus niños, ya que uno de los proyectos más importantes de esta localidad es la educación, para intentar erradicar el analfabetismo y porque la formación es la única esperanza de este pueblo para poder progresar.
Y es que el umbral de pobreza a las puertas del desierto es demasiado elevado. Por eso, Chus Puras y todo su equipo apuestan, en cada edición de Clio Raid Marrakech by Bathco, por conseguir mejorar la calidad de vida de estos pequeños y mayores, realmente necesitados.
En cuanto a la cuarta etapa, indicar que continúa la aventura auténtica en la segunda edición de Clio Raid Marrakech by Bathco, en donde cada instante es pura emoción. Ayer, la caravana de los Clios disputó su cuarta etapa, Merzouga-Merzouga, de 133,8 kms, de los que 110,5 fueron de tramo de tierra. Si en la jornada del martes, la arena y los ríos secos fueron los que protagonizaron casi toda la jornada, en esta ocasión fueron las pistas rápidas -algunas muy rápidas- y los fuera de pista, los que hicieron las delicias de los participantes.
Fue, sin duda alguna, una etapa en donde los equipos disfrutaron al máximo de la conducción y de los paisajes, que, de nuevo, dejaron huella entre los participantes. El paso por el puerto, las minas, las pistas que nacen de repente y terminan no se sabe muy bien en donde…
El día se remató con la fiesta del desierto, que sorprendió a todos los participantes que se lo pasaron realmente en grande, cantando y bailando los sones marroquíes hasta la madrugada.
Hoy la gran caravana de los CLios sigue su rumbo y afronta la etapa doble Dakar. Una etapa maratón, en la que no hay asistencias y en la que los participantes pasarán por algunas de las pistas del mítico Dakar. Paisajes africanos, pistas rápidas, algunos pequeños arenales… los participantes tendrán que completar 269,1 kms, de los que 146 son de tramo de tierra. Una jornada más para disfrutar por todo lo alto de la aventura auténtica que es Clo Raid Marrakech by Bathco.