El Bosque, alberga 245 animales de 85 especies diferentes, el año pasado en sus instalaciones se recuperaron 76 animales salvajes y este año ya han llegado las primeras víctimas de la Navidad. El Zoo pide que no se regalen animales si no se está seguro de poder atenderlos adecuadamente.

En 10 días será primavera, pero como todos los años estas fechas, antes de que lleguen los días más largos con más horas de luz, el Núcleo zoológico El Bosque comienza una nueva temporada y llega cargada de trabajo.

El Zoo de Oviedo, es un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza, y los animales, pero también para aprender porque según Gonzalo Rubio, Conservador del Zoo “En el centro fomentamos mucho la educación ambiental, y la sensibilidad hacia el medio ambiente, pero no sólo entre los más pequeños, también entre los mayores” y es que El Bosque es también un aula de la naturaleza en la siempre hay algo nuevo que aprender.

Además el Zoo de Oviedo realiza una labor de recuperación de animales muy importante y este año ya ha recibido los primeros animales víctimas de las compras irresponsables de navidad, y no será porque no se hagan campañas para que no se regalen animales, y recordar que no son un juguete. Gonzalo Rubio asegura que “llegará un momento en que no tengamos espacio para más animales, si esto no frena y los padres siguen mandando las cartas de sus hijos pidiendo animales a los Reyes Magos, será un caos a medio plazo, por ello es tan necesaria la educación que aquí brindamos y que no se regalen animales, que no son un juguete, que requieren tiempo y cuidados, y si no es les puede dar es mejor no tenerlos, y mucho menos regalarlos sin saber si a quien se regala podrá cuidarlo como se merece”.

En cuanto a labor de recuperación de especies salvajes, El Bosque sigue sin tener apoyo de las administraciones, y cada vez se hace más necesaria. El año pasado el zoo de Oviedo recogió 76 animales salvajes. Muchos se recuperaron y posteriormente se liberaron al medio ambiente, aunque según Gonzalo Rubio “no se pudieron recuperar y liberar todos por el estado en que a veces llegan, muchos fruto de un accidente de carretera con muy mal pronóstico, pero el caso es intentarlo hasta el final, algo que nos llena de orgullo y satisfacción y que también deberían de realizar en otros zoológicos del país”

En los meses en los que el zoo queda cerrado al público (Diciembre, Enero y febrero), la actividad aumenta, Gonzalo Rubio afirma que “siempre tenemos algo que mejorar o reformar. Este año hemos incorporado nuevas especies de reptiles que también han sido rescatadas, en este caso por problemas familiares, al igual que la mayoría de animales que viven en El Bosque. Más del 70% de los animales son rescatados, algunos por compras impulsivas y otros por tráfico ilegal y decomisos”

Este año llegar al zoo no será una odisea gracias a que “el Ayuntamiento de Oviedo ha hecho el trabajo cuando tocaba hacerlo y  hace unas semanas que el acceso está limpio y desbrozado, aunque también será necesario realizar otro desbroce en verano para que la visibilidad sea buena, así como la seguridad de los peatones y de los vehículos que llegan hasta el zoo, la maleza volverá a crecer y tapará la pequeña carretera que da acceso a las instalaciones zoológicas si no se hace, pero esperamos que eso no llegue a ocurrir” asegura Gonzalo Rubio.

Y con la nueva temporada del único zoo con el que cuenta la capital del Principado comienzan las excursiones de escolares que se prolongarán hasta el final del periodo lectivo. En sus instalaciones realizan visitas guiadas al centro y reciben clase de educación ambiental “así que entre semana es fácil ver a niños aprendiendo en El Bosque, un poco de educación y respeto hacia los animales y la naturaleza, además de muchas otras cosas del mundo natural”

El año pasado el Zoo de Oviedo recibió 15.000 visitas, no sólo de escolares, también de turistas y familias, e incluso, de personas que acudieron solas buscando un rato de desconexión del mundo urbano.