El consejero afirma que cuenta con el respaldo de ayuntamientos y equipos directivos, y que no se reducirá plantilla
Oviedo (E.P.).- La Consejería de Educación ha acordado para el próximo curso 2016-2017 la fusión de los colegios públicos La Gesta 1 y La Gesta 2, en Oviedo, y el traslado de los alumnos con los que actualmente cuenta el colegio Fernández Carbayeda de Avilés al Colegio Público de Llaranes. Además, estudia nuevos traslados en Oviedo y Mieres.
Es la primera fase de la reordenación del mapa de la red de centros asturianos, que este martes ha adelantado el consejero de Educación y Cultura, Genaro Alonso, en declaraciones a los medios de comunicación.
Esta primera actuación se completa con el visto bueno a otra fusión de centros, este caso concertados. Se trata de los colegios Beata Imelda y Santo Tomás de Aquino, en Langreo, que pasarán a constituir un nuevo centro llamado Beata Imelda-Santo Tomás.
En el caso de los colegios de La Gesta, el nuevo centro saliente contaría con un total de 700 alumnos. En el caso de Avilés, son seis los alumnos que actualmente cursan estudios en el Fernández Carbayeda y que pasarán a dar clases en el CP Llaranes.
Alonso ha matizado que se trata de un "traslado de matrícula de carácter definitivo", y no de un "cierre orgánico", dado que la intención de la Consejería es que el edificio del Fernández Carbayeda se siga utilizando para labores pedagógicas.
La Consejería está estudiando medidas similares en otros dos centros. Serían el Colegio Público El Soto, de Oviedo, que actualmente cuenta con nueve alumnos que podrían ser trasladados al Colegio Público El Villar, y del Colegio Público de Murias (Mieres), que tiene en estos momentos cuatro alumnos, y que pasarían a dar sus clases al Llerón-Clarín del mismo municipio. En ambos casos, se trata de una cuestión en estudio.
POCA "RESISTENCIA"
Alonso ha asegurado que la Consejería ha tomado esta decisión tras realizar un estudio y tras reunirse tanto con los alcaldes de los municipios afectados como con los equipos directivos de los centros en cuestión. Ha afirmado que no ha encontrado oposición y que la "únicamente en las asociaciones de padres y en los consejos escolares parece que hay alguna resistencia".
Ha asegurado que se trata de medidas tomadas en "beneficio de los estudiantes". "Nos parece más rentable para los alumnos, en casos de colegios que solo tienen cuatro alumnos, tenendo una escuela mayor a solo dos kilómetros", ha ejemplificado. En su opinión, se facilita más "capacidad de socialización, una mayor capacidad pedagógica mayor, y más posibilidades de atención educativa". Ha dejado claro que en ningún caso estas medidas conllevarían reducciones de plantilla.
En el caso concreto de Murias, de aplicarse la medida, según Alonso, los alumnos tendrían derecho a los servicios de transporte y comedor del Llerón-Clarín, cuando ahora no lo tienen.
Al respecto de la ratio mínima de cuatro alumnos para mantener centros abiertos, ha explicado que se trata de un umbral aplicable a centros rurales, y que estos son centros de entornos urbanos con pocos alumnos.