En contestación a una pregunta del PP, Martínez ha explicado que una contratación ordinaria no sería deseable porque prolongaría mucho la actual situación, que no es buena para nadie. Ha explicado que la falta de una empresa que se ocupe de la seguridad en el complejo hospitalario se debe, en primer lugar, a una circunstancia "inesperada" como fue el concurso de acreedores de la empresa SEN, que comunicó que ya no podía hacerse cargo del servicio.

    Martínez ha dicho que, a partir de ese momento, el Gobierno trabajó en "tiempo récord" para conseguir un contrato con otra compañía. Sin embargo, no fue posible porque la única empresa que se presentó terminó renunciando. Alegó que había encontrado que todos los trabajadores estaban de baja.

   Guillermo Martínez se ha comprometido a buscar la solución más ágil posible, pero ha dicho que no puede firmar algo en contra de lo que los técnicos le plantean. Ha dicho además que comprenden los problemas que está causando la situación.

   Desde el PP, el diputado Rafael Alonso ha explicado que lo ocurrido se viene arrastrando desde el mes de diciembre y que se está generando "gran incertidumbre" entre vecinos, profesionales y usuarios del hospital. "Se necesita una solución urgente", le ha insistido al consejero.