ArcelorMittal sigue penalizada por la sobrecapacidad del sector y el bajo precio del acero, según Norbolsa
El grupo Arcelor Mittal ha trasladado al comité de empresa de la ACB que, por ahora, no se puede cuantificar el tiempo de duración de la parada de la planta y que habrá que esperar a que la situación del mercado cambie para poder reabrir la Acería de Sestao, según ha informado la compañía a Europa Press.
Los responsables de Arcelor han mantenido este miércoles una reunión con los miembros del comité, tras la solicitud que le habían formulado los representantes de los trabajadores. Al término de ese encuentro, la dirección iba a reunirse con los mandos de la planta.
En la reunión, según ha explicado Arcelor se les ha informado de que el mercado del acero está "muy complicado" y que, en estos momentos, "no hay visibilidad". Por lo tanto, la empresa ha señalado que habrá que esperar todavía unos meses para ver si cambia la situación del mercado.
Por lo tanto, ha asegurado que, en estos momentos, no se puede precisar cuánto tiempo permanecerá parada la planta. Su planteamiento es reabrir la fábrica si cambia la situación, pero si el mercado "no varía, no será "posible la continuidad" de ACB.
Arcelor, que realizará labores de mantenimiento en la plaza, ha indicado que está a la espera de que desde las autoridades europeas se adopten "medidas rápidas".
Arcelor, que ha señalado que mantienen contactos permanentes con las autoridades europeas y españolas, ha asegurado que "no puede hacer más" y que, para que cambie la situación, son necesarias las medidas desde Europa.
ArcelorMittal penalizada por la sobrecapacidad del sector
ArcelorMittal continúa penalizada por la sobrecapacidad del sector y el bajo precio del hierro y del acero, según indican los analistas de Norbolsa en su último informe sobre la empresa.
En el cuarto trimestre de 2015, la compañía presentó unas pérdidas de 6.686 millones de dólares, por encima de las esperadas por el consenso, tras realizar una provisión por deterioro de activos de 4.718 millones de dólares y registrar una carga excepcional 909 millones de dólares principalmente por depreciación de inventarios.
Durante la presentación de los resultados, ArcelorMittal anunció la reducción de 4.000 millones de dólares de deuda mediante una ampliación de capital de 3.000 millones de dólares y la venta de su participación del 35% en Gestamp por 1.000 millones de dólares, lo que, a juicio de Norbolsa, "despeja ciertas dudas sobre la situación financiera de ArcelorMittal y dota a la compañía de flexibilidad para poder hacer frente a sus vencimientos".
ArcelorMittal, bajo el supuesto de ausencia de recuperación en los diferenciales del acero o en el precio de las materias primas, fija un objetivo de generación de Ebitda de 85 dólares por tonelada en 2020. El plan estratégico 2020 de la compañía pretende en este periodo conseguir una mejora estructural de EBITDA cercana a los 3.000 millones de dólares.
De cara a 2016, asumiendo la persistencia de las condiciones actuales de mercado, la compañía podría alcanzar un Ebitda superior a los 4.500 millones de dólares, según Norbolsa. La reducción de capex, la suspensión del dividendo y la reducción de los costes financieros posibilitan a ArcelorMittal reducir hasta los 4.500 millones sus necesidades anuales de caja, "lo que sitúa a la compañía en su breakeven de generación de FCF, aportando un margen insuficiente para garantizar la neutralidad de caja dado el repunte de riesgos macro", señala la firma de analistas.
Considerando el 'guidance' de 2016 como alcanzable y asumiendo un descuento del 30% en el precio de suscripción de la ampliación de capital, Norbolsa fija un precio objetivo de 3,31 euros por acción para ArcelorMittal.
Por último, pese a reconocer que el nivel actual de cotización representa "un punto de entrada atractivo en una inversión a largo plazo", el nivel de riesgos en el que opera la compañía les hace ser prudentes a 12 meses, por lo que establece la recomendación de mantener sobre el valor.