Por RAG/DICYT
La posibilidad que ofrecen las energías renovables para generar electricidad a pequeña escala ha inspirado varios proyectos que, alejados de la tradicional concepción de gran producción y lejana al usuario, pretenden adaptar el consumo a las necesidades reales de personas situadas relativamente cerca de la fuente generadora. Esta mañana se han presentado en las jornadas Soriagrid-2011 algunas de estas iniciativas de microrredes, así como proyectos de mejora del uso de la energía en las ciudades.
Celebrado en el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ceder-Ciemat), en Soria, en el encuentro han participado diferentes expertos en estas tecnologías, como el miembro de este centro Luis Hernández, quien ha explicado a DiCYT que el espíritu de estas microrredes se fundamenta en la idea de smart grid (redes inteligentes), es decir, aquella que busca aplicar a una red eléctrica “en ocasiones, obsoleta” todo el conocimiento disponible para lograr su desarrollo, como ha ocurrido en terrenos como el automovilístico o el de las telecomunicaciones.
Hernández, que ha pronunciado esta mañana una conferencia titulada “Introducción a las microrredes”, ha asegurado que a través de la utilización de estas tecnologías de producción energética a escala y de las posibilidades y el potencial que ofrecen las fuentes renovables se puede conseguir una optimización del consumo.
Algunos proyectos
Entre los proyectos que se han explicado esta mañana en Soriagrid-2011 se encuentra el GEBE (Gestor de Balances Energéticos en redes con generación distribuida inteligente), participado por Ceder-Ciemat entre otros y cuyos objetivos son el de diseñar e implementar un sistema inteligente de gestión de redes con el que crear una producción energética sujeta a unos determinados económicos, así como el de garantizar la seguridad y estabilidad de la electricidad, han informado desde Ceder-Ciemat a DiCYT.
Este dispositivo se va a probar en un sistema de redes eléctricas muy distantes entre sí y con distintos patrones de generación. El mercado potencial de las herramientas que se desarrollen en este proyecto será, desde el de grandes generadores y cogeneradores hasta el de distribuidores, pasando por pequeños consumidores en áreas residenciales, han trasladado.
También durante la jornada se han detallado las líneas maestras del proyecto Optimagrid de sistemas inteligentes de optimización y autogestión de microrredes con energías renovables, aplicadas estas tecnologías a áreas industriales. Liderado por la Universidad de San Jorge de Zaragoza, es un proyecto europeo incluido en el fondo de desarrollo regional FEDER-SUDOE.
Su objetivo es diseñar, desarrollar e implantar unos sistemas informáticos que sean capaces de decidir en tiempo real la distribución óptima de la energía renovable producida, siempre teniendo en cuenta la demanda de un área industrial concreta. Su fin es promover el que las áreas industriales sea puedan autogestionar en materia energética para que se pueda cambiar el concepto contaminante asociado a ellas. Los modelos que cree permitirán también incrementar el uso de energías renovables, disminuir consumos energéticos y reducir las emisiones de dióxido de carbono en estos espacios de producción industrial.
Labor en Soria
Otro de los planes que se ha presentado en las jornadas es el denominado Corredor CO2Cero, promovido por el Ayuntamiento de Soria, y el cual, entre las diversas medidas que contempla, prevé implantar distintos instrumentos de seguimiento y valoración de los factores de emisión de dióxido de carbono (CO2), promover el compostaje como forma de utilizar los residuos generados por las actividades de mantenimiento urbano en espacios verdes, desarrollar un nuevo servicio de gestión de residuos urbanos o potenciar la jardinería sostenible en el espacio “verde” que este plan ha diseñado en la ciudad, han informado desde el Consistorio soriano.
El proyecto concibe la ciudad como espacio geográfico donde aplicar de manera coordinada diferentes técnicas innovadoras de gestión del territorio y de los recursos normativos, ambientales, sociales y educativos y su objetivo es facilitar el control de las emisiones de CO2, implicando para ello a todos los sectores de la sociedad y a todo el territorio municipal.