Durante una conferencia organizada por Barcelona Tribuna, Mariano Rajoy, ha declarado que "la reestructuración del sistema financiero debe culminarse ya; y en ella debe primar la transparencia y el saneamiento sobre la recapitalización".
Los rasgos distintos de la reforma tributaria propuesta por Rajoy deben ser: "ampliar las bases de recaudación, ayudando a la generación de empleo y el incentivo a la actividad económica; prioridad en la mejora de la financiación de las empresas, en unos momentos en que los canales tradicionales están muy dañados; favorecer a cuantos promuevan el crecimiento económico a través de la creación de empleo, la inversión, el ahorro y la innovación".
Para ello, el presidente del Partido Popular ha planteado que "las empresas no tributen por las plusvalías que obtengan en la venta de sus activos fijos cuando las reinviertan. Se fomenta así que el capital invertido se reutilice en la modernización de la propia actividad empresarial".
Una nueva Ley de Estabilidad Presupuestaria
Por otra parte, Rajoy ha señalado que es necesaria una nueva Ley de Estabilidad Presupuestaria que "recuperará los controles al gasto establecidos en la anterior ley de 2002, rebajados por la ley socialista de 2006 e incumplido sistemáticamente a partir del 2008. Se fijará un techo de gasto vinculante para las Comunidades Autónomas".
Finalmente, Mariano Rajoy ha destacado que "todas las actuaciones del futuro gobierno deben dar señales precisas a inversores, emprendedores y consumidores de que las cosas han cambiado"
"Un nuevo gobierno deberá presentar ante el Parlamento un plan completo, coherente y entendible por todos con un desarrollo temporal de cuatro años", ha concluido.
LAS PROPUESTAS
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha desgranado hoy, durante su discurso en el Foro Barcelona Tribuna, algunas propuestas económicas de su programa de gobierno.
? Nueva Ley de Estabilidad Presupuestaria: fijará un techo de gasto vinculante para las Comunidades Autónomas.
? Amplia remodelación estructural de las administraciones públicas (ayuntamientos, diputaciones, cabildos y Administración Central del Estado): que evite la duplicación de funciones y servicios.
? Culminación de la reestructuración del sistema financiero: deben primar la transparencia y el saneamiento sobre la recapitalización. De esta forma, en pocos meses el mapa bancario español debe estar estabilizado y contar con un marco competitivo, bien capitalizado, sin necesidad de ayudas públicas y con acceso normalizado a los mercados de capitales.
? Reforma tributaria para incentivar la creación de empleo, la inversión y el ahorro y asegure un reparto equitativo de los costes de la salida de la crisis: ampliará las bases de recaudación ayudando a la generación de empleo y el incentivo a la actividad económica; priorizará la mejora de la financiación de las empresas; y favorecerá a cuantos promuevan el crecimiento económico a través de la creación de empleo, la inversión, el ahorro y la innovación.
? Las empresas no tributarán por las plusvalías que obtengan en la venta de sus activos fijos cuando las reinviertan, para fomentar que el capital invertido se reutilice en la modernización de la propia actividad empresarial. Igualmente estudiamos modificar la fiscalidad de los beneficios no distribuidos, de manera que aquellos beneficios dedicados a hacer más competitiva la empresa mediante la adquisición de nuevos activos tributen diez puntos menos que aquellos destinados a ser distribuidos a los accionistas.
? Pymes y autónomos pagarán el IVA cuando hayan cobrado efectivamente las facturas o se creará una cuenta tributaria para que las empresas puedan compensar los impuestos que deben a las Administraciones con los pagos que éstas les adeudan.
? El Gobierno presentará al Parlamento un plan completo, coherente y entendible por todos con un desarrollo temporal de cuatro años: que desarrolle los objetivos de la legislatura y los medios que se van a utilizar para alcanzarlos.