(De: realsporting.com).-El Sporting perdió por 2-0 en en el Sánchez Pizjuán ante el Sevilla, en partido de Liga correspondiente a la jornada número 15. Más allá del resultado están los daños colaterales, con Jorge Meré qeu abandonó el terreno de juego en camilla, con Bernardo que vio la quinta amarilla y con Luis Hernández expulsado en la acción del penalti que propició el 1-0 y que no lo pareció.
Incidencias: unos 15 grados de temperatura. Llovió ligeramente en Sevilla a primera hora de la noche. El Sporting jugó con su primera equipación: camiseta rojiblanca y pantalones y medias azules. Bernardo ofició de capitán por el Sporting, mientras que Krychowiak lo hizo por el Sevilla.
Carlos Castro, novedad en la alineación rojiblanca
Abelardo decidió dar continuidad al once inicial que ganó la pasada jornada con la única excepción de Carlos Castro, que entró en el equipo en lugar del lesionado Sanabria. El paraguayo se quedó en Gijón como consecuencia de una contractura muscular. Luis Hernández seguió una nueva jornada en el lateral derecho con Jorge Meré situado en el centro de la zaga junto a Bernardo, quien no había escondido durante la semana que éste es un partido especial para él, dado que era el primero que disputaba ante el Sevilla, el equipo en el que se formó desde juveniles.
Comenzó con la intensidad esperada el encuentro. Los dos equipos presionaban la posesión del rival en busca del robo.
Tras un previo intento del Sevilla, el primer remate rojiblanco, desviado, fue de Mascarell, tras un rechace en el minuto 4.
El Sevilla buscaba la verticalidad en su juego, con jugadores de gran envergadura, con bastantes más centímetros de altura en general que los rojiblancos. El Sporting trataba de responder con velocidad. Mantenía más intensidad según pasaban los minutos.
El Sporting tapaba las líneas de pase y la afición local se impacientaba por momentos con los suyos.
No se había cumplido la primera media hora del encuentro cuando el central Kolo vio la primera amarilla del partido. En el 31 la vería Ndi.
En el 33, tras un ligero rebote, el balón llegó a la cabeza de Fernando Llorente, pero estaba Cuéllar para minimizar el testarazo del riojano.
El Sevilla ganaba metros, aunque se defendía con orden el Sporting, incluso en los complicados balones aéreos. No renunciaba tampoco a salir con velocidad tras recuperar el equipo gijonés.
Con el 0-0 en el marcador finalizaba una primera parte impecable del Sporting en defensa. Arriba tuvo más problemas, aunque nunca renunció al ataque, pero sin haber llegado con peligro.
Sin cambios al descanso en el Sporting
No hizo cambios al descanso Abelardo, a diferencia de Emery, que dio entrada a Konoplyanka.
El Sevilla salió con fuerza, intentando el disparo desde lejos, pero sin fruto.
En el minuto 3, el balón llevaba camino del gol, pero Cuéllar sacó una mano espectacular. Un auténtico paradón de viodeoteca.
Apretaba el Sevilla y Abelardo mandaba llamar a Lora. El balón era de los locales y había que buscarle otro "tempo" al partido.
El de Móstoles entraba por Carlos Castro en el minuto 12. Lo hacía para apoyar el centro del campo. Halilovic pasaba a combinar la posición de enganche con Ndi.
Jorge Meré, mareado
En el minuto 15 se marchaba mareado en camilla Jorge Meré. Le suplía Álex Menéndez.
Abelardo tenía que reorganizar nuevamente el equipo. Lora pasaba al lateral derecho y Luis Hernández se situaba de central. El recién salido Álex Menéndez pasaba por delante de Isma López y Jony cambiaba a la derecha.
El domiinio del juego era claramente del Sevilla, que se encontraba una y otra vez con Cuéllar.
En cualquier caso, se estrellaba ante un ordenado Sporting.
Bernardo era amonestado: la quinta amarilla para el colombiano.
Banega era también amonestado, por protestar.
En el 29, penalti contra el Sporting, muy dudoso, porque igual podría haberse señalado falta en una u otra dirección, ya que pareció un forcejeó entre Llorente y Luis Hernández, pero el colegiado torció la mirada hacia la portería gijonesa y señaló pena máxima. Le costaba, además, la expulsión a Luis Hernández.
Lanzó Gameiro y pese a que llegó a tocar Cuéllar, el balón entró por la potencia con la que había sido lanzado.
Abelardo daba entrada a Rachid por Halilovic.
En el 35, Gameiro remataba de cabeza haciendo imposible cualquier respuesta de Cuéllar en un escorzo imposible.
El partido le quedaba totalmente de cara a los locales con dos goles a favor y con el Sporting en inferioridad numérica.
Así discurriría hasta el pitido final, aunque el Sporting buscó infructuosamente estirar líneas.
Habría también en el tiempo añadido un tiro al poste de la portería gijonesa.
Derrota y demasiados daños colaterales.