Ayer falleció en Oviedo a los 89 años un allerano ilustre, el ingeniero de minas Alfonso García Arguelles. Tuve el honor de tratarle en relación con mi actividad periodística desde finales de la década de los 70 y luego, con el paso de los años, mantuvimos la amistad hasta hace poco menos de un mes que me lo encontré por última vez, ya en situación física delicada, en el Centro Médico.
Alfonso García Arguelles, aunque nacido en Turón siempre estuvo vinculado desde pequeño a Moreda, fue un profesional que amó la minería y supo mucho del sector. Sin tener nunca devaneos políticos en su momento pudo llegar a presidente de HUNOSA cuando hablamos de una empresa pública entonces con más de 25.000 trabajadores. Para mí que por unas razones u otras he vivido la evolución de la principal empresa minera de Asturias desde su constitución en 1967 Alfonso García Arguelles fue uno de los directivos clave en la misma en los años de la transición política en nuestro país. En los finales de la dictadura las figuras clave en HUNOSA fueron su primer director general Víctor Ayuela Berjano, y su tercer presidente Andrés Martínez Bordiú. En la siguiente etapa, desde el inicio de la democracia hasta la llegada al poder de los socialistas, hubo dos personas clave, José Manuel Fernández Felgueroso como presidente y Alfonso García Arguelles como director de producción. Siendo cronista laboral en La Voz de Asturias y Europa Press tuve la ocasión de seguir intensamente las negociaciones de los convenios en las que desde el punto de vista de la empresa siempre destacó este ilustre allerano.
Persona de carácter abierto y dialogante sabía discutir con los representantes sindicales y defender el carbón asturiano en Madrid, incluso ante los organismos oficiales que aquí representaba. Recuerdo una anécdota con ocasión de la negociación de un convenio. Tras horas encerrados en el "pozo moqueta" sin llegar a acuerdo alguno Alfonso García Arguelles se levantó diciendo a la comisión que se iba con el documento definitivo en su maletín, documento que le había dado el ministro. Un fogoso representante de CCOO, creo recordar que era Aladino Tresguerres del pozo Venturo, quiso arrebatárselo provocándose una situación tensa no sin ciertos ribetes cómicos. Alfonsón, como le conocían sus amigos, logró no perder el maletín en el que, la verdad, no llevaba documento alguno pero sí había logrado con su actitud poner nerviosos a los "cocos". Luego, recuerdo, sindicalista y ejecutivo se hicieron muy amigos quedando la anécdota para la historia jamás contada de HUNOSA.
Con el paso de los años y el cambio de administraciones Alfonso García Arguelles pasó a la empresa privada, a la Minero Siderúrgica de Ponferrada como director general, logrando revitalizar el funcionamiento de la compañía entonces propietaria en Asturias de mina de La Camocha. Uno de sus aciertos, por cierto, fue fichar para la MSP como director comercial al mierense Pepín Prieto pero el declive del sector era imparable y así como HUNOSA inició una caída muy acusada la MSP entró en un descenso definitivo. Con la jubilación Alfonso García Arguelles siguió residiendo en Oviedo y pasando largas temporadas en una finca que tenía en Quintes que la proximidad del mar le producía energía, según el mismo me comentó en más de una ocasión.
Siento su fallecimiento y doy a sus hijos -había quedado viudo años atrás- mi más sentido pésame. Uno de los últimos gurús de la minería asturiana se nos ha ido. Descanse en paz.
1 comentario
# nacho mieres Responder
29/12/2015 10:53Perdón de allerano nada, era de Turón