Dos emprendedores de la UEMC ponen en marcha una innovadora consultoría ambiental

Dos emprendedores de la UEMC ponen en marcha una innovadora consultoría ambiental

Por Cristina G. Pedraz

/DICYT 

 

Conectar el conocimiento científico relacionado con el medio ambiente con su aplicación práctica es el objetivo fundamental de una nueva empresa, Ecitma, el proyecto emprendedor de dos ex alumnos de Ciencias Ambientales de la Universidad Europea Miguel de Cervantes (UEMC) de Valladolid, Sara Sánchez González y Germán Sanz Lobón. La empresa, cuyas siglas hacen referencia a Conocimiento e Innovación Tecnológica en Medio Ambiente, cuenta con cuatro líneas de trabajo: gestión y conservación de recursos naturales; SIG (Sistemas de Información Geográfica), ordenación del territorio y paisaje; áreas en las que basan sus investigaciones.

 

Según han explicado a DiCYT, la empresa tiene su origen en los diferentes proyectos de investigación llevados a cabo durante su trayectoria académica. “Al finalizar los proyectos fin de carrera y fin de máster nos dimos cuenta que se quedaban en eso, en proyectos universitarios, por lo que intentamos darles salida. Siempre hemos estado vinculados a la Universidad con becas y trabajos como técnicos, y hemos decidido dar el paso para realizar más trabajos por nuestra cuenta y dar salida a estos estudios que habíamos hecho”, detallan.

 

En el caso de Sara Sánchez, ha dirigido sus investigaciones hacia la restauración, preservación y mejora de espacios degradados como las Lagunas de Villafáfila, en la provincia de Zamora. “Hemos estudiado la evolución desde mediados del siglo pasado de las diferentes políticas intervencionistas de ordenación del territorio, cómo han afectado de manera negativa y de manera positiva en los últimos años a la preservación de este tipo de ecosistema”, precisa.

 

Por su parte, Germán Sanz ha profundizado en la gestión de los recursos naturales, principalmente hídricos. “Vimos la necesidad en el mercado de estudiar las formas de abastecer agua a diferentes infraestructuras. En este sentido, intentamos realizar un balance hídrico de un acuífero situado en los Montes Torozos, en Valladolid”. En estos momentos, ambos combinan sus proyectos con Ecitma con el desarrollo de sus tesis doctorales en dos líneas: la evolución de los usos del suelo mediante la aplicación de técnicas de teledetección multitemporal y la elaboración de modelos matemáticos de evaluación de recursos hídricos subterráneos y sostenibilidad.

 

Líneas de negocio

 

Tras trabajar durante algunos años de manera autónoma, ambos investigadores decidieron crear la empresa. “Teníamos algunos problemas a la hora de presentarnos a licitaciones y decidimos dar el paso a constituirnos como empresa con vistas a que mejorara esta situación”, aseguran, para lo que contaron con una beca para emprendedores de la UEMC.

 

Respecto a las diferentes líneas de negocio, la gestión y conservación de recursos naturales se centra en “la realización de estudios de impacto ambiental, de restauración de ecosistemas degradados o de gestión de recursos naturales o no, como los forestales o el agua”, explican. Del mismo modo, la parte de SIG se fundamenta “en el desarrollo de cartografía, de metadatos o los sistemas híbridos para proyectos concretos, desde proyectos urbanísticos hasta proyectos de ingeniería o incluso análisis de riesgos ambientales”.

 

Por otro lado, la línea de ordenación del territorio hace referencia a la realización “de planes de desarrollo local, planeamiento del territorio o agendas 21, por ejemplo, todo ellos con un enfoque conservacionista del medio y de desarrollo rural sostenible”. Finalmente los estudios de paisajismo se dirigen, entre otras cosas, “a evitar que a la hora de hacer un jardín en una urbanización se metan plantas alóctonas, exóticas, que produzcan una contaminación genética y ambiental”. Este tipo de estudios están encaminados a realizarse de una forma más colaborativa, “normalmente, como parte de un estudio más importante”, indican.

 

I+D+i enfocada al desarrollo sostenible

 

Tal y como subrayan Sara Sánchez y Germán Sanz, el fin último “es que todo estudio, aunque sea de gabinete, tenga su parte científica y experimental, de tal manera que se pueda hacer una evolución de la metodología y lograr la ecoinnovación, que es la base la empresa”. “Es una forma de I+D+i enfocada hacia el desarrollo sostenible real”, añaden.

 

Otra característica de la empresa, concluyen, es que consideran “que la investigación y captar todos los días conocimientos es la mejor forma de estar activo y no quedarse atrasado”. De este modo, los emprendedores asisten a diversos congresos nacionales e internacionales cada año para presentar los avances de sus trabajos, y además han tramitado varios proyectos de ámbito europeo relacionados con la I+D+i, la cohesión territorial, el paisaje y la cooperación y desarrollo transfronterizo

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