La colaboración de los medios de comunicación fue determinante.
Gracias a la colaboración de los medios de comunicación, a través de los cuales se publicó una fotografía del joven, un conocido suyo lo reconoció y lo puso en conocimiento de los servicios de emergencia. La Policía Nacional localizó el domicilio donde residía, logrando posteriormente contactar telefónicamente con su madre e indicarle el hospital dónde se hallaba su hijo ingresado, quedando ésta en desplazarse inmediatamente al lugar.
El joven, natural de Bruselas (Bélgica) y nacido en el año 1988, padece un trastorno neurológico que afecta a su sentido de la realidad, motivo por el cual no pudo aportar ningún dato de su identidad.