Asegura que el atestado estaba plagado de errores que vulneraban derechos
El exjefe de la Policía Local de Oviedo Agustín de Luis, acusado de paralizar un atestado de tráfico para favorecer al presunto culpable de un atropello ha declarado este lunes que si se archivó el atestado fue "por los muchísimos errores del mismo-- unos 63-- y porque así se lo dijo el entonces Fiscal Jefe, ya fallecido Gerardo Herrero" con quien consultó lo que se podía hacer con ese atestado como lo hacia en otras ocasiones. "Estoy diciendo la verdad. Si en su día no dije con quien había consultado fue porque Gerardo Herrero me prometió que -el atestado-- se archivaría", ha dicho De Luis.
De Luis ha comparecido este lunes en el juicio ataviado con su toga y ha reiterado que "en ningún momento ocultó el atestado y prueba de ello es que el mismo "fue sustraído". "Ese atestado nunca desapareció", ha insistido de Luis que ha indicado que él examinó el atestado el día 19 -seis días después de los hechos-- y constató que estaba plagado de errores.
"Si el atestado se hubiese hecho con normalidad yo nunca lo hubiese conocido", ha dicho De Luis que ha manifestado que el mismo era "digno de una tesis doctoral" por la cantidad de errores. Así ha indicado que el incidente no tenía ni heridos, ni daños materiales, ni partes médicos ya que era solo un incidente de tráfico y el atestado "se debería haber hecho en una hora sin más".
Ha relatado que fue él quien decidió entregar el coche del detenido que permanecía en el depósito municipal "bajo su responsabilidad" y consciente de que en ese atestado se vulneraban muchos derechos del detenido avisó que consultaría lo que se podía hacer con ese atestado tan mal elaborado.
"Lo consulté con el entonces Fiscal Jefe de Asturias Gerardo Herrero. No estoy utilizando a un muerto, digo la verdad. Lo consulté con Herrero que me prometió que lo iban a archivar", ha dicho el acusado que ha insistido en que él "no ordenó paralizar nada ni conocía de nada al conductor detenido".
DECLARACIONES DE LOS TESTIGOS
En la sesión de este lunes también han declarado varios de los agentes que intervinieron de uno u otro modo en el caso por el que está siendo juzgado De Luis. El testimonio de especial relevancia ha sido el del Intendente de la Policía Local, que aseguró haber acompañado a Agustín de Luis a una reunión con el Fiscal Jefe, Gerardo Herrero, en la que "el era un convidado de piedra", pero en la que aseguró abordaron el asunto y el ya fallecido Herrero le dijo que "no se preocupase que las irregularidades eran graves y quedarían archivadas".
Otros agentes coincidieron en señalar que el conductor detenido estaba claramente bajo la influencia el alcohol --"no podía hablar ni apenas mantenerse en pie"-- y fue necesario esposarlo ante su actitud violenta. También indicaron que el hombre renunció a abogado y se negó a hacerse la prueba de alcoholemia y que el atropellado no quiso ser atendido por ambulancia.
Los agentes han coincidido también en señalar que no supieron más del atestado hasta que conocieron su desaparición por la prensa. Si han admitido que quizás se cometieron errores a la hora de elaborar el atestado, pero explicaron que esos errores "se suelen subsanar a través de nuevas diligencias, pero nunca son motivo para archivar el caso y no enviarlo al juzgado".
"En 20 años que llevo en atestados nunca se ha archivado un caso por tener errores", ha indicado uno de los agentes que ha comparecido, palabras que fueron corroboradas por otros testigos. Otro testigo ha asegurado que "no vio ninguna irregularidad en el atestado, quizás errores que podían ser corregidos".
TESTIMONIO DEL ATROPELLADO
También ha comparecido el hombre que resultó atropellado por el detenido que ha indicado que paró para cruzar en un paso de cebra y cuando tenía el semáforo en verde para cruzar pasó la furgoneta del detenido que no paró y "según pudo se apoyó en el capó de la furgoneta".
"Me di cuanta de que el hombre estaba borracho. Llamé al 112 Emergencias y seguí al vehículo hasta que paró. Ahí me amenazó y me dijo que me vas a denunciar tú a mi chaval que soy amigo de no se quien me dijo", ha indicado el testigo que ha manifestado que renunció a subir al hospital porque sabía que era un golpe sin más.
Además ha indicado que el detenido se puso muy violento con los agentes y aseguró que a su juicio la policía hizo el trabajo que tenía que hacer de manera correcta. "Les dije que no quería poner denuncia por mi parte y que yo tenía un golpe pero al perro ni lo había tocado", ha añadido.
LOS HECHOS SEGÚN EL MINISTERIO FISCAL
El Ministerio Fiscal sostiene que, el 19 de enero de 2012, el acusado, que ocupaba el cargo de Comisario Jefe Principal de la Policía Local de Oviedo, recibió en las dependencias de la Policía Local a un hombre para tratar sobre la situación de su furgoneta. Ésta, desde el día 13 de ese mismo mes, estaba en el depósito municipal de la calle Francisco Bances Candamo de Oviedo, inmovilizada por decisión de los agentes que extendieron un atestado por el que se había intervenido el vehículo como instrumento de sendos delitos contra la seguridad vial: uno por conducir bajo la influencia de las bebidas alcohólicas y otro por negarse a someterse a las pruebas de alcoholemia, además de haber atropellado a un peatón, aunque sin causarle lesiones apreciables.
El fiscal sostiene que el acusado, por motivos que se desconocen y para favorecer al hombre, dio las órdenes que consideró precisas para que el atestado, que estaba en el mostrador de instructores dentro de su correspondiente carpeta para su salida hacia el Juzgado, no fuese remitido a éste, cercenando de este modo cualquier posibilidad de investigación de los hechos.
Al mismo tiempo, ordenó a un inspector, Jefe de la Unidad de Policía Judicial y Jefe de la Sección de Atestados, que acomodase los libros de registro a la nueva situación, haciendo para ello las enmiendas que fueran precisas.
Así, éste, siguiendo la práctica habitual en el libro de registro de accidentes y alcoholemias, ocultó con cinta correctora los datos que se querían modificar, para manuscribir sobre el nuevo espacio en blanco en el tipo de delito "Atropello" y, en observaciones, "Peatón renuncia a curarse".
La sesión continuará mañana a las diez de la mañana en la sala número dos de la Audiencia Provincial de Oviedo.