El presidente sirio, Bashar al Assad, debe poner freno a sus fuerzas de seguridad y evitar que se produzcan nuevos homicidios ilegítimos, ha expresado hoy Amnistía Internacional, teniendo como telón de fondo la ciudad costera de Banias, que continúa sometida a una situación casi de bloqueo, e informaciones de que el ejército ha detenido a todos los varones mayores de 15 años en la población vecina de Al Baydah.

“La crisis de derechos humanos en Siria empeora día a día, casi hora a hora”, ha manifestado Malcolm Smart, director del Programa para Oriente Medio y el Norte de África de Amnistía Internacional.

“El gobierno parece firme en su propósito de acabar con todo atisbo de disidencia haciendo uso de los medios más represivos: disparando a manifestantes pacíficos, llevando a cabo detenciones masivas y bloqueando zonas en las que la población se ha atrevido a pedir reformas. Esta situación tiene que acabar. El presidente de Siria tiene que acabar con esto.”

Amnistía Internacional ha recibido una lista con los nombres de, al menos, 200 personas muertas desde que comenzaron las protestas en Siria el pasado 18 de marzo, aunque las cifras reales podrían ser mucho más elevadas. La mayoría de los fallecidos murieron a causa de los disparos con munición real emitidos por las fuerzas de seguridad o por hombres vestidos de paisano, con los que actuaban conjuntamente. No obstante, el gobierno considera que los principales culpables son las “bandas armadas” de la oposición.

“Las afirmaciones del gobierno y sus desmentidos no suenan convincentes. La versión del gobierno se contradice totalmente con los testimonios que hemos recibido de testigos presenciales desde los epicentros del descontento social: Deraa, Damasco, Latakia y ahora Banias, que hablan de francotiradores del gobierno que disparan a los manifestantes y del empleo de fuerza letal, que han provocado homicidios ilegítimos”, ha afirmado Malcolm Smart.

“La única forma de conocer la verdad es garantizando la realización inmediata de una investigación independiente, completa y exhaustiva. Estas son las exigencias del derecho internacional en casos de violaciones tan graves de derechos humanos, pero las autoridades sirias todavía tienen pendiente solicitar dicha investigación y cumplir con sus obligaciones internacionales.”

El derecho internacional también exige que los responsables de muertes ilegítimas y otras violaciones graves sean procesados ante los tribunales en juicios justos.

“En la práctica, Siria ha permitido durante muchos años a sus fuerzas de seguridad cometer actos de tortura y homicidios ilegítimos con total impunidad”, ha declarado Malcolm Smart.

“Ya es hora de que se les llame la atención y rindan cuentas aplicándoseles la ley.”

La población costera de Banias lleva inmersa en la oleada de protestas desde el 8 de abril y las fuerzas de seguridad mantienen prácticamente asediada la ciudad desde la noche del 9 de abril, con controles de seguridad para vigilar las entradas y salidas y denuncias por cortes en el suministro de agua y electricidad. Según informes, las fuerzas de seguridad parecen haberse centrado especialmente en los barrios y poblaciones musulmanas suníes, incluidas Al Baydah, Al Basatin y Beit Jnad.

En Al Baydah, según informes, el pasado 12 de abril se llevó a cabo una redada en una operación de registro casa por casa, durante la cual al menos 200 hombres y niños mayores de 15 años fueron detenidos por hombres armados vestidos de paisano que actuaban bajo la supervisión del ejército sirio. Un testigo ha contado a Amnistía Internacional que los hombres armados llevaban el rostro cubierto y que abrieron fuego en varias ocasiones durante la redada. Se dice que los detenidos recibieron palizas y fueron esposados, y que les hicieron entonar consignas a favor del gobierno. Se desconoce la cifra exacta de las personas que continúan detenidas.

Existen informes contradictorios sobre los hechos, pero todo parece indicar que las protestas en Banias comenzaron de forma pacífica y que, en un determinado momento, estalló la violencia. De acuerdo con SANA, la agencia de noticias oficial siria, el ministro del Interior afirma que el conflicto comenzó cuando miembros de un grupo armado contrario al gobierno abrieron fuego contra un autobús que transportaba soldados, y mataron a nueve de ellos. Otras fuentes alegan que varios soldados murieron a manos de otros miembros del ejército por negarse a abrir fuego contra los manifestantes.

A pesar de los constantes llamamientos por parte de Amnistía Internacional para que se realice una investigación sobre los asesinatos políticos masivos perpetrados en el pasado, las autoridades sirias nunca han dado a conocer ningún detalle sobre las investigaciones o medidas disciplinarias puestas en práctica.