Asturias (E.P.9.-La Asociación de Vigilantes de Seguridad Privada Avispa ha acusado este sábado a la dirección del Centro de Menores de Sograndio y a la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior, de "negligencia" en el proceder con un interno que, recién llegado a las instalaciones intentó suicidarse. Medio hora después, según el colectivo, fue conducido al Taller de Albañilería sin haber sido sometido a ningún examen ni tratamiento.
En una nota de prensa, Avispa explica que este viernes, a las 09.30 horas aproximadamente, un interno de etnia gitana, ingresado el día antes en el Centro de Menores de Sograndio, intentó suicidarse cuando se encontraba en una de las habitaciones de aislamiento del segundo piso".
Según la explicación de la asociación, "el interno, una vez ingresado en el Centro, fue aislado, sin compañía, en una de las habitaciones del segundo piso". "Cuando algún interno ingresa por primera vez, es obligatorio poner en practica el "protocolo Antisuicidios, en previsión de posibles daños físicos o intentos de suicidio", ha explicado la asociación.
"Dicho protocolo, aunque se active, no se dispuso de la manera correcta, pues el interno debe estar acompañado permanentemente por personal educativo del centro y bajo estrecha vigilancia", critica Avispa.
"De la misma manera, se deben cumplir unas exigencias mínimas de protección, como son retirarle todas sus pertenencias y vestuario, dotándole de vestuario propio del Centro y sin posibilidad de tener a su alcance cualquier utensilio u objeto con el que autolesionarse", añade el colectivo.
Por lo visto, el interno utilizó una toalla de la que disponía para atarla a la ventana de la habitación y posteriormente intentar suicidarse. "Fueron los Vigilantes de Seguridad, durante sus rondas de vigilancia, los que observaron la escena y rápidamente actuaron para evitar el fatal desenlace", explica la nota.
"Sorprendentemente, media hora después de sucedido el intento de suicidio por parte del interno, y por orden de la Dirección del Centro, este es conducido al Taller de Albañilería junto con más internos, taller en el cual disponen de todo tipo de herramientas (martillos, azadas, palas, etc.) lo que hubiese podido provocar otra situación similar a la acontecida minutos antes", denuncia el colectivo.
Para Avispa, resulta "negligente que el interno no fuese sometido a un examen psicológico por parte del servicio medico del Centro para diagnosticar las razones del intento de suicidio o cuanto menos someterlo al tratamiento más adecuado, permitiendo que acudiese a las clases en el referido Taller de Albañilería".
Por lo tanto, "no sólo ha fallado de forma clara el protocolo anti suicidios, sino también la vigilancia del interno y su posterior tratamiento, poniendo en riesgo tanto su propia vida como la del resto de internos y trabajadores", señala Avispa.
Para la ascoación, "una vez más, se pone de manifiesto el caos organizativo promovido por la Dirección del Centro y amparado por la Consejería de Presidencia a través de la Dirección General de Justicia e Interior, incapaces de controlar la seguridad de internos y trabajadores en este Centro de Internamiento de Menores, ausente de una verdadera política de reinserción de los internos que allí cumplen su condena".