Ante las información dada a conocer hoy por la Consejería de Cultura del Principado de Asturias, acusando a la Fundación del Centro Niemeyer de «graves irregularidades en sus cuentas», la Dirección del Centro manifiesta su perplejidad y estupefacción ante dicha aseveración. Todos los justificantes que la Consejería reclama en su nota están en las oficinas de la Fundación, que es el lugar en el que tienen que estar archivadas. La Fundación ha ofrecido en reiteradas ocasiones a la Consejería todas las informaciones necesarias y no obtuvo respuesta. Las cuentas de la Fundación, que alcanzan unas cifras muy modestas, están sometidas a continuas auditorias y han superado con plena satisfacción todas ellas.
La Consejería de Cultura ha intentado hoy forzar una reunión del Patronato absolutamente ilegal, que solo consiguió concitar a los afiliados de su partido, y ese comunicado debe entenderse en ese contexto con la idea de desprestigiar el trabajo realizado de forma independiente por el Centro Niemeyer. Una institución cultural, que con el presupuesto más bajo de las grandes infraestructuras culturales españolas (apenas algo más de 900.000 euros el año pasado), ha conseguido transformar una ciudad, cuadruplicar su número de turistas y ser un revulsivo de la economía regional. El Centro Nimeyer cuenta solo con cuatro (4) empleados fijos. La aportación de la Consejería de Cultura al presupuesto del Centro apenas supera el 20 por ciento del total. El coste de la construcción del Centro fue de 44 millones de euros, un patrimonio que ya se ha revalorizado ampliamente y que es propiedad del Principado de Asturias. La Fundación simplemnte gestiona el Centro con el modestísimo presupuesto antes indicado.
Informaciones como la ofrecida hoy por la Consejería de Cultura solo consiguen dañar la imagen y el prestigio de una institución cultural que es ya un referente en todo el mundo.
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