• El Gobierno asturiano reclama a la Secretaría de Estado de Industria y a la Dirección General de Tributos un modelo financiero-fiscal que no discrimine al sector naval español

El Gobierno del Principado de Asturias apoyará al Ministerio de Industria y a la Dirección General de Tributos para que España pueda presentar urgentemente a Bruselas una nueva propuesta sólida de régimen financiero-fiscal que permita al sector naval recuperar la actividad y que no discrimine al sector naval español, ya que sólo desde una perspectiva unificada y de cooperación se podrá ejercer la necesaria presión que permita a Bruselas tomar una decisión favorable para los intereses del sector naval asturiano y español.

El actual sistema, denominado “tax lease”, es un instrumento financiero que permite la amortización acelerada de los buques que se construyen en España. Con este sistema los astilleros pueden ofrecer al armador precios de entre 20% y un 25% inferiores a los que tendrían si no usasen este instrumento.

Algunos países europeos, entre ellos Holanda, Noruega o Portugal, denunciaron esta práctica a la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea, que inició una investigación al respecto y derivó en la suspensión del “tax-lease”. Esta medida está lastrando fuertemente la competitividad del sector de la construcción naval en Asturias y España, prácticamente paralizado.

Por ello, independientemente de la investigación de la Unión Europea -cuyo resultado podría demorarse hasta finales de 2012-, el Gobierno del Principado de Asturias manifiesta su apoyo incondicional al sector naval y urge a la Secretaría de Estado de Industria y a la Dirección General de Tributos a buscar un modelo financiero-fiscal diferente, que permita al sector naval recuperar la actividad y que no discrimine al sector naval español, que debe ser aprobado forzosamente dentro de la presente legislatura.

Dado que el naval tiene que competir con países en los que los costes salariales y/o el tipo de cambio permiten a sus astilleros ser más competitivos, es imprescindible la búsqueda de un nuevo método para que los astilleros españoles puedan seguir optando a vender sus barcos en el mercado mundial. El resto de países europeos ya han instrumentado medidas similares para favorecer a sus astilleros. Un ejemplo podría ser el modelo adoptado por Francia, que en 2006 también fue denunciada por utilizar un sistema similar al “tax-lease”.