Victorias del Sanborondón y el Carla en el Trofeo Presidente de Gijón a Luanco

Victorias del Sanborondón y el Carla en el Trofeo Presidente de Gijón a Luanco

El Sanborondon, de Carlos Elósegui se hace con el IV Trofeo Presidente, del Real Club Astur de Regatas, sumando  el madrileño su tercera victoria en el Trofeo.  Por su parte, el Carla, de German Álvarez-Hevia fue el mejor en la clase II.

 

Debido al escaso viento que reinó durante toda la jornada, solamente se pudo disputar  la primera manga entre  Gijón y Luanco. La vuelta a Gijón desde la capital gozoniega, tuvo que ser anulada un poco más tarde de dar la salida al  caer totalmente viento. 

 

El  viento flojo de componente noroeste a la hora del inicio de la  primera manga  entre Gijón y Luanco,  obligó al comité de regatas a dar la salida a la altura de las Amosucas,   y por lo tanto,  anular el  recorrido entre boyas previsto en la bahía de San Lorenzo. La travesía de 5,32 millas  se disputó con un viento de   entre cinco y seis nudos de intensidad  y mar llana .

 

El barco más rápido fue el Sanborondon, de Carlos Elósegui  que invirtió un tiempo de una hora, diez minutos y dieciséis segundos  en cruzar la línea de llegada situada en la entrada del puerto de Luanco.  De esta forma, el del Náutico de Madrid repite el triunfo conseguido en las dos primeras ediciones del Trofeo.

 

El segundo más rápido fue el Geiser de Fernando Alonso, a más de cuatro minutos del primero. El Tamborilero,  de Alfredo Flórez que defendía el título se tuvo que conformar en esta ocasión con la tercera plaza del grupo I.

 

En el grupo II, German Álvarez-Hevia del Marítimo de Luanco,  a bordo del Carla, con su hijo German a la caña  fue el mejor llegando, así mismo, destacado a la meta.  La segunda plaza fue para el Silfo, de José Ángel García, seguido del Fortuna III,  de Álvaro Cuetos.

 

Después de reponer fuerzas en Luanco, a las cinco de la tarde  todo estaba  dispuesto para la celebración de  la segunda manga de  vuelta a Gijón. Sin embargo,  la regata se suspendió al desaparecer totalmente el viento poco después de dar la salida.

 

 

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