Desde el grupo municipal de Somos Avilés queremos dejar bien claro nuestra postura al respecto de la propuesta de apoyo a la candidatura de Llaranes como Pueblo Ejemplar presentada por el Club de Cultura de Llaranes en nombre de ese barrio avilesino, y matizar las cuestiones que creemos necesario hacer llegar a la ciudadanía.
Una de les nuestras señas de identidad como agrupación de electores es la defensa profunda y radical de la democracia participativa, concepto que se opone absolutamente a una institución como la monarquía, obsoleta y claramente contraria a los principios de igualdad que defendemos las mujeres y los hombres de Somos Avilés. Por ello, nuestro enfoque es no entrar en el juego, consciente o inconsciente, de la legitimación de ningún jefe de estado que no pase previamente por las urnas. La Fundación Princesa de Asturias responde, a nuestro entender, nada más que a una función publicitaria y de lavado de cara de la monarquía, aprovechando la resonancia de los premiados y premiadas con sus galardones para apuntalar y dar valor al soberano de turno. Se trata sencillamente de un ejercicio de marketing al servicio de unos intereses muy concretos, en el que la ciudadanía queda reducida al papel de simple espectador. Nuestra posición, en este sentido, esta muy clara, ya sea como demócratas o como asturianos y asturianas, basta con recordar de que el título de Príncipe de Asturias se instituyó en el siglo XIV como una manera de vincular directamente nuestro país al Reino de Castilla en un momento histórico en que desde esta tierra se exigía más poder de autogobierno.
La creación del Premio al Pueblo Ejemplar, viene a ser una pieza más del aparato propagandístico monárquico, donde se nos quiere presentar a un rey cercano a los problemas de su súbditos y súbditas, que bebe sidra, anda por callejas, juega a los bolos, apadrina niños y hasta teita una cabaña. Esta filosofía política rememora justamente la época dorada de las monarquías: la Edad Media, cuando el vulgo esperaba que Su Majestad se había acordado de ellos y les concediera alguna gracia.
Somos conscientes que muchas de las candidaturas a este premio se presenten porque saben que si se lo conceden, los pueblos o barrios verán de la noche a la mañana arreglados muchos de su problemas: alcantarillado, reparación de carreteras, limpieza de fachadas, rejuvenecimiento del entorno… Y para encima reciben una prestación económica con las que poder seguir trabajando y mejorando esos lugares. Por lo tanto, la ‘devoción monárquica’ del pueblo no es para tanto y se ve más pragmatismo que otra cosa a la hora de decidir optar a este galardón.
Pues bien, una vez hechas todas estas salvedades, hemos asumido una cierta contradicción ideológica y, después de hablar y reunir con el responsables del Club Popular de Cultura de Llaranes, daremos nuestro apoyo crítico a esta cuestión. Lo hacemos única y exclusivamente por los vecinos y vecinas de Llaranes, que quede clarísimo, por su trabajo en hacer de ese barrio un lugar mejor para vivir, por su esfuerzo en la conservación del patrimonio arqueológico industrial, por darle vida cultural y dinamismo social a una zona de nuestro concejo que ha sufrido el declive que ha supuesto la reconversión…
Por último, queremos manifestar el compromiso de Somos Avilés para que los problemas de nuestros pueblos y barrios, de nuestra gente, alcanzan la solución que merecen a través de la Administración Pública, y que somos los representantes políticos los verdaderos responsables de que así sea. No podemos permitir que sigan acudiendo a entidades de talante privado al servicio de los intereses monárquicos a la busca de soluciones, reconocimiento o promoción, nada más así dejaremos de ser súbditas y súbditos para convertirnos en ciudadanía libre.
Más información en:
http://www.podemosaviles.info/en-apoyo-de-llaranes-como-pueblo-ejemplar-no-de-lacorona/