Greenpeace apoya la manifestación del próximo domingo 11 de septiembre para pedir el cierre inmediato de la central nuclear de Garoña que con el lema “Fukushima nunca más, Garoña cierre ya” ha sido convocada por la Coordinadora contra Garoña, y que tendrá su inicio a las 12h en Barcina del Barco (Burgos).
La central nuclear de Garoña es una instalación peligrosa y fuera de normativa, que padece graves problemas de seguridad.
Es conocido el fenómeno de corrosión múltiple que afecta a diversos elementos de la vasija del reactor que son fundamentales para la seguridad (penetraciones de la vasija, barrilete, bombas de impulsión…), los problemas de venteo de la contención, el deterioro del cableado eléctrico, entre otras muchas deficiencias, cuya importancia ha sido obviada por el Consejo de Seguridad Nuclear.
Pero, además, ahora se conoce, gracias a varios informes encargados por Greenpeace a entidades homologadas por el Ministerio de Medio Ambiente para la recogida y análisis de muestras termométricas, que está instalación tiene graves problemas para la refrigeración correcta del núcleo del reactor, incluso en su funcionamiento rutinario, lo que está produciendo un grave problema de contaminación térmica en el río Ebro