Los bomberos desplazados a Ribadesella para controlar y atajar las llamas del edificio que este viernes se ha incendiado en la localidad asturiana de Ribadesella ya se están centrando en el saneamiento de las fachadas y en labores de enfriamiento. Se trata de un trabajo laborioso que les podría tener allí toda la noche, según fuentes consultadas del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA).

   El incendio se produjo a primera hora de la tarde en un inmueble que linda con la calle Gran Vía 20 y Calle Comercio 25. Espectaculares llamas salían del edificio de tres plantas, que en la parte baja tenía ubicada una ferretería.

   Hubo que desalojar a decenas de vecinos de la zona. De hecho, una de las prioridades de los bomberos fue precisamente que las llamas no se extendieran a los dos edificios que limitan con el afectado. Lo consiguieron.

   Otro problema con el que se encontraron fue con el hecho de que por la zona pasaban líneas eléctricas, lo que motivó además que se tuviese que cortar el suministro de luz.

   Finalmente, y aunque el edificio ha quedado calcinado, no ha habido que lamentar desgracias personales. Ya se ha restablecido el suministro eléctrico en la zona. Las causas del incidente aún no han trascendido. De momento, la prioridad sigue siendo enfriar la estructura que queda en pie y evitar que puedan caer restos a la vía pública.