Bruselas.-La presión de los gobiernos conservadores, especialmente el de Madrid, puso este sábado a Europa al borde de una nueva crisis, esta vez de dimensiones incalculables, con el futuro de la siguiente generación en juego, al rechazar la oferta del Ejecutivo griego. La presión de Mariano Rajoy y su patrocinadora, la ex comunista Merkel, según fuentes, fue decisiva para el nuevo intento de derribar al legítimo gobierno de Grecia. La obsesión del premier del PP español contra los movimientos sociales, que lo llevó a aprobar la 'Ley Mordaza' de represión ciudadana', la segregación de sexos en la enseñanza y el encarecimiento de las matrículas universitarias para limitar el acceso a la cultura de los españoles con pocos recursos, lo llevaría a preferir una nueva edad oscura en España y Europa --que a él no afectaría-- con tal de que "el pueblo no tenga poder". Mariano Rajoy es, desde un principio, como expresó en Grecia codo con codo con el dimitido dirigente de la derecha homóloga, Samaras, el. principal escollo para una solución europea. El miedo del presidente del PP español lo mueve a 'comprometer a todo el pueblo español y el Estado en su cruzada contra Syriza'.
Alexander Stubb @alexstubb hace 3 horas
End of #Eurogroup session. To be continued tomorrow.