Daniel Alonso y el Puerto local reciben sendas Medallas de Oro de Avilés

Daniel Alonso y el Puerto local reciben sendas Medallas de Oro de Avilés

Avilés.-El empresario Daniel Alonso y la Autoridad Portuaria de Avilés recibieron esta tarde de manos de la alcaldesa, Pilar Varela, las Medallas de Avilés, en su categoría de Oro, por su contribución al desarrollo y progreso de la ciudad. Ambas distinciones fueron aprobadas por unanimidad de todos los grupos municipales en sesión plenaria. Actualmente cuentan con la Medalla de Oro de Avilés La Voz de Avilés, el arquitecto Óscar Niemeyer y Graciano García, ex director de la Fundación Princesa de Asturias.

 

Palabras de la alcaldesa, Pilar Varela

 

La “Medalla de Avilés” en su categoría de oro es la máxima condecoración del Ayuntamiento de Avilés, creada para premiar especiales o singulares merecimientos, beneficios señalados, o servicios extraordinarios prestados a Avilés por personalidades, entidades o colectividades, y que se consideren dignos de tan elevada recompensa.

 

Este año, cumpliendo los trámites previstos en el Reglamento municipal de Honores y Distinciones, la Corporación en Pleno acordó por unanimidad otorgar dos nuevas “Medallas de Avilés” en su categoría de oro:

 

  • A la Autoridad Portuaria de Avilés con motivo de su centenario y reconociendo los méritos contraídos a lo largo de su historia, así como por su vinculación, compromiso con la ciudad y contribución en su desarrollo.

 

  • A don Daniel Alonso Rodríguez, por los méritos contraídos a lo largo de su actividad empresarial, así como por sus valores humanos y compromiso con la sociedad avilesina.


 

 

 

 

 

 

Autoridad Portuaria de Avilés

 

Nada se puede explicar en Avilés sin el puerto.

 

El Puerto ha sido un factor decisivo en nuestra configuración y evolución como territorio desde los comienzos de la actividad humana en torno a la ría.

 

De su importancia e hitos a lo largo de la historia nos ha hablado Miguel Calleja Puerta, y vamos a tener ocasión de profundizar en ella gracias a la exposición y a los actos organizados con motivo del centenario. 

 

Me gustaría aprovechar estas palabras para referirme a la historia más cercana, de la que somos testigos quienes aquí nos encontramos.

 

-       En los años 40 y 50 del pasado siglo, Avilés experimenta un proceso acelerado e intenso de industrialización en el que el puerto tiene un alto grado de protagonismo. La llegada de Cristalería, ENDASA y, sobre todo, ENSIDESA hará que la ciudad pase en menos de dos décadas de algo más de 20.000 habitantes a más de 90.000. La transformación urbana y de todo el territorio en torno a la ría fue espectacular y determinante de lo que somos hoy. Y el puerto siderúrgico ha sido decisivo en el desarrollo industrial y económico de Avilés, de su comarca y de Asturias.

 

-       En 1960 se otorga la concesión a ENDASA para construir su propio muelle en la margen derecha.

 

-       En 1970 se acometen trabajos para el ensanche del canal de entrada y  la remodelación de la “Curva de Pachico” para permitir la entrada de buques de mayor tonelaje.

 

-       La crisis y la transformación de los modelos productivos industriales marcaron la década de los 80. Se inicia la reconversión industrial y con ella el abandono de grandes cantidades de suelo e instalaciones, elevada contaminación, expulsión del mercado de trabajo de miles de trabajadores y una ría convertida en cloaca.

 

-       Esta situación se matiza a finales de los años 90, con un proceso ilusionante de regeneración urbana que afecta a toda la ciudad y, fundamentalmente, a la ría y su entorno.

 

La primera premisa para el nuevo proyecto de ciudad se situó en la recuperación de la ría no solo desde el punto de vista comercial, sino también -y sobre todo- desde el medioambiental. El puerto y la ría se conciben como el eje vertebrador de la regeneración de la ciudad y referente de nuestra identidad como territorio.

 

El Ayuntamiento y la Autoridad Portuaria lideran y afrontan desde entonces diferentes proyectos que han transformado de forma sustancial la ciudad y el puerto. Desde mediados de los años 90, las inversiones para mejorar la ría y su entorno así como para ampliar y modernizar las instalaciones portuarias han sido posibles gracias a una veintena de proyectos y a un presupuesto inversor cercano a los 500 millones de euros.

 

Actuaciones que han transformado y modernizado la imagen y la actividad de Avilés: la Nueva Rula, el Puerto deportivo, la escultura Avilés de Benjamín Menéndez, el Centro Niemeyer, los cruceros…

 

La Autoridad Portuaria sigue hoy en la misma línea de trabajo, mejorando las instalaciones portuarias y su dotación, e invirtiendo en mejoras de carácter medioambiental.

 

La constitución de la Junta de Obras del Puerto, antecedente de las actuales Autoridades Portuarias, supone el comienzo de cien años de mejoras continuas hechas por una institución que simboliza la razón de ser y la esencia de la ciudad de Avilés.

 

Por todo ello, la Corporación de Avilés ha decidido unánimemente la concesión de la Medalla de Oro de la ciudad a la Autoridad Portuaria de Avilés, coincidiendo con el centenario del nacimiento de la Junta de Obras del Puerto de Avilés.

 

 

Daniel Alonso Rodríguez

También reconocemos hoy la labor de un empresario que ha conseguido, con esfuerzo y tesón, formar un entramado empresarial que ha proporcionado y proporciona trabajo y actividad económica a Avilés y a toda Asturias. Daniel Alonso Rodríguez, es la imagen viva del lema con el que se presenta su grupo industrial: “El tesón de una persona. La fuerza de un grupo”.

 

Aunque nacido en Burgos, Daniel Alonso es avilesino de adopción. Llegó muy joven a Avilés, como otros tantos vecinos y vecinas de su pueblo, de Arija, cuando su pueblo, sus gentes y su fábrica, Cristalería Española, vieron anegadas muchas de sus calles, de sus viviendas  y sus instalaciones por la construcción del embalse del Ebro. Fue a comienzos de los años cincuenta del pasado siglo.

 

Muy pronto empezó su actividad emprendedora. Con apenas 23 años abandona su  vinculación laboral de la multinacional francesa del vidrio para poner en marcha una iniciativa empresarial que demuestra la inquietud y el afán de superación innato a su persona. En 1957 crea Danima, que ya cumplido gozosamente más de cincuenta años. Poco a poco, paso a paso, siempre con el trabajo, la inquietud empresarial, el tesón y la seriedad por bandera, va creando un grupo industrial primero en el metal y luego en otras muchas tecnologías,  adaptándose y adelantándose a los cambios que se suceden en el mundo económico y empresarial.

 

Conceptos de los que ahora hablamos habitualmente como innovación, investigación o creatividad, estuvieron siempre en la mente de Daniel Alonso. El metal, los bienes de equipo, las energías renovables, el acero y tantos y tantos sectores de la actividad industrial y de servicios van surgiendo y creciendo, generando empleo y riqueza de la mando de Daniel Alonso.

 

Windar o Dacero son meros ejemplos de las nuevas actividades surgidas en el seno del grupo en estos últimos años. Mención aparte supone la adquisición de Idesa en 2014, que ha posicionado al grupo en un referente mundial en el ámbito de la fabricación de bienes de equipo para las energías y el oil&gas. Una empresa, además de clara vocación avilesina, ubicada en el Parque Empresarial Principado de Asturias. Tiempos y nombres nuevos junto a otros como Tadarsa, de sobra conocidos en nuestra comarca y claros ejemplos de su carácter emprendedor y de una trayectoria de décadas.

 

El crecimiento sostenido y sostenible de sus empresas le ha permitido generar cientos, miles de puestos de trabajo en Avilés y su comarca, ajeno a cualquier idea de lo que ahora llamamos eufemísticamente “deslocalización”.

 

Pero también compatibilizando esta vocación de servicio a Avilés con una actividad nacional e internacional que le ha hecho llegar e instalarse en todo el territorio español y en países de como India o Brasil.

 

Así, vemos en su trayectoria como, de aquella pequeña nave fundacional en la que se cobijaba un diminuto taller, a base de esfuerzo, de trabajo en equipo y de incentivar la investigación y la innovación tecnológica, llega Daniel Alonso a formar un grupo empresarial de dimensión internacional, con unos productos de alto valor añadido y muy demandados en los mercados especializados. Pero no solo eso, sino que la consideración hacia sus trabajadores y colaboradores han hecho posible que, en circunstancias como las actuales, operaciones como la venta de una de las empresas matrices del grupo, Daorje, efectuada por motivos estratégicos de posicionamiento empresarial, se ha realizado sin pérdida alguna de empleo.

 

Un compromiso con su ciudad que no solo se limita al ámbito empresarial. Constante ha sido su colaboración desinteresada, altruista y muchas veces anónima y callada, con esa discreción suya tan propia, en muchas iniciativas sociales, culturales y deportivas de la que los avilesinos y avilesinas hemos podido disfrutar.

 

Reconocimientos de diversa índole, regionales como la Medalla de Plata de Asturias, el premio a la innovación empresarial asturiana otorgado por el diario El Comercio en 2008, los concedidos por  el Rotary Club Internacional, o locales el de la trayectoria empresarial del diario La Voz de Avilés en 2014 o la Fundación Sabugo Tente Firme han jalonado, entre otros,  más que merecidamente su vida. Y también, como no, nacionales. Basta recordar solamente a modo de ejemplo, la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, concedida por el Gobierno de España en el no tan lejano 2010.

 

Trabajo, creación, emprendimiento, pero también solidaridad y compromiso con su ciudad y sus ciudadanos.

 

Su trayectoria profesional y personal es mérito más que suficiente para que ahora, en el momento en el que anuncia su jubilación, con la tranquilidad y el convencimiento de la continuidad de su obra a través de sus hijos, el Consistorio Municipal reconozca toda esta trayectoria y haya decido también por unanimidad, conceder a un hombre valioso, conceder a Daniel Alonso Rodríguez, con todo merecimiento, la Medalla de Avilés en su categoría de Oro.

 

 

Cierre

No me gustaría despedirme sin congratularme por la feliz coincidiencia que supone que recibáis esta distinción en un acto conjunto. No es casualidad porque tenéis mucho en común. Ambos sois un referente de Avilés y de Asturias.

 

Compartís una trayectoria de resistencia frente a las dificultades. Trabajando duro con el objetivo primordial de hacer crecer y progresar vuestras actividades, pero sin perder nunca de vista el crecimiento y el progreso del territorio que os acoge.

 

Evolucionando y fortaleciendo vuestras capacidades día a día y, a la vez, resistiendo y con altura de miras en los momentos menos propicios. Hoy sois un ejemplo para todos y todas,  sabéis dónde vais. Y eso es algo que sólo lo pueden hacer quienes, como vosotros, tienen un proyecto.

 

Desde la modificación del Reglamento de Honores y Distinciones se habían concedido “Medallas de Avilés” en su categoría de oro a La Voz de Avilés, a don Oscar Niemeyer y a don Graciano García. Hoy, os sumáis a ellos.

 

En nombre de los avilesinos y avilesinas, felicito al Puerto de Avilés y a Daniel Alonso por esta merecida distinción. Es nuestro galardón más importante, con el que distinguimos a los y las mejores. Os habéis hecho merecedores de él.

 

FOTO:  ·

 

Dejar un comentario

captcha