El Real Oviedo se está quedando sin cobre. Tras el tercer robo de este material sufrido en las instalaciones de El Requexón, el primer equipo se entrenó ayer en el Carlos Tartiere y hoy lo está haciendo en el San Gregorio.
El robo del material de suministro eléctrico es ya el tercero en lo que va de año y las pérdidas materiales suman entre 40.000 y 60.000 euros según diversas fuentes. En esta ocasión el robo afectó a los vestuarios y oficinas por lo que no se dispone ni de agua caliente, ni funciona el resto de la iluminación.
El equipo, que se encuentra a un punto de declararse campeón en su categoría, peregrina por los campos de la ciudad debido a la intensa actividad de los cacos.