Asturias.-La presidenta de FORO y candidata a la presidencia del Principado, Cristina Coto, ha asistido hoy, acompañada de otros miembros de su partido a nivel regional y local, a la manifestación convocada por los trabajadores de la fábrica de armas de Trubia. En el transcurso de la misma afirmó que “Javier Fernández debió liderar ante el Gobierno de España la defensa de la readmisión de los 55 despedidos de Santa Bárbara, pero no lo ha hecho, en esta como en tantas otras cosas, por su dependencia de los escaños del Partido Popular para seguir en el sillón”.

“Desde FORO siempre defendimos lo engañoso del Plan de Integración, que además utilizó el pretexto más sensible, garantizar el empleo, para poder desplazar a todos sus trabajadores a Trubia, y después vino lo que vino: ni La Vega ni Trubia, un expediente de suspensión para la extinción y suspensión de 246 empleos en Trubia de manera unilateral, con 55 despedidos de manera forzosa y sin ningún tipo de negociación”, señaló.

“La dirección de Santa Bárbara –añadió Coto- inició la presentación del Plan de Integración de La Vega en Trubia en 2012 para dar lugar a una plantilla integrada de 640 trabajadores, con el objetivo irreprochable de ‘mantener el empleo en Asturias, objetivo prioritario’, según consta en el documento distribuido por la propia empresa”.

“Con la plantilla de La Vega trasladada en su totalidad a Trubia, y liberados los apetecibles terrenos de las instalaciones de La Vega en Oviedo, propiedad del Ministerio de Defensa, se consuma por sorpresa la fase oculta de la maniobra con el despido y regulación de empleo de más de 500 trabajadores; de esta forma, el Plan de Integración se puso en evidencia como lo que ahora descubrimos que realmente era: la avanzadilla de un Plan de Cierre de Santa Bárbara en Asturias”, denunció.

Para Coto “ni los gobiernos de Javier Fernández ni de Rajoy ejercieron sus responsabilidades en defensa del interés de Asturias frente a quienes han promovido un atropello a los trabajadores, instituciones y ciudadanos asturianos, lo han aprobado y autorizado sin la mínima oposición exigible, cometiendo un fraude ético como el que se está perpetrando en Oviedo y en Trubia”.

“Tras todo ello, aflora el inusual interés de algunos en ocuparse de gestionar el aprovechamiento urbanístico de los terrenos de La Vega, como lo demuestra el publicitado acuerdo entre el alcalde de Oviedo y la Consejera de Fomento del Principado de constituir una Comisión Técnica, adoptado en una reunión celebrada ‘a bombo y platillo’ el pasado día 6 de febrero”, indicó.

“55 personas que perdieron su empleo en mayo de 2013 se encuentran a quince días de que se terminen todas sus prestaciones por desempleo, siendo un hándicap para su incorporación a la vida laboral, su edad y su particular experiencia y formación siempre dedicada al mundo armamentístico, algunas de ellas con más de 25 años de experiencia en este sector, que tienen ahora la posibilidad de recuperar su empleo y poner en valor su eficacia”, subrayó.

“En la actualidad, -continuó la presidenta- la carga de trabajo ha aumentado y a principios de 2016 la empresa necesitará incluso incrementar su plantilla, por ello apoyamos la propuesta sindical de recolocar a las personas despedidas. Es una cuestión de voluntad trabajar para la reubicación de estas personas”.

 “Nos negamos al desmantelamiento de la fábrica de La Vega, porque se veían venir los despidos y así fue. Ahora hay que buscar una solución para los trabajadores despedidos y también para los que están regulados, con graves pérdidas salariales”, manifestó.

Igualmente, añadió Coto, “hemos trasladado la situación a nuestros parlamentarios nacionales para poder hacer llegar al Ministerio la necesidad que supone para Asturias la recolocación de los 55 trabajadores despedidos; es necesario lograr un compromiso político para la readmisión. Aunque la Audiencia Nacional ha avalado el expediente de regulación de empleo, la cantidad de obra que había en 2012 y se preveía para años posteriores ha cambiado considerablemente, no es comparable con la prevista para 2016”.

“Desde Foro –indicó- nos ofrecemos a mantener la reuniones que sean necesarias con la empresa a fin de poder llegar a una verdadera solución. Entendemos que Javier Fernández debería haberse reunido ya con General Dynamics para poner en valor nuestra región y conseguir la readmisión”.

“Sin duda, la recomendación política más contundente que puede recibir esta factoría es la del Ministerio de Defensa, quien proporciona la obra en torno al 80% de la facturación total de la empresa”, explicó.

A juicio de de Coto “desgraciadamente el PP en Madrid y el PSOE en Asturias se pasan la pelota pero ninguno remata. La inoperancia de ambas administraciones se trasforma en dejadez cuando estamos hablando de 55 familias con graves problemas económicos, que ahora podrían mejorar la producción”.

“Asturias tiene capacidad y experiencia para ser bandera en este sector como lo fuimos durante mucho tiempo, General Dynamics apostó por Asturias junto con Sevilla para la fabricación de vehículos ‘SV’, obra que previsiblemente durará hasta el 2024, según las condiciones del contrato inicial. Cabe recordar que alrededor de esta gran industria se desarrollan muchos puestos de trabajos auxiliares, que serán sin duda un impulso a la economía de la región”, subrayó.

“En Asturias –denunció- estamos afrontando procesos de cierre de empresas y regulaciones temporales de empleo muy duros, y aún más dolorosos para quienes pierden temporalmente o definitivamente su puesto de trabajo. En Asturias nunca se había dado un caso de engaño y ocultación de los datos para sacar adelante una inconfesada maniobra de cierre de las fábricas de armas con la connivencia del Ministerio de Defensa en el engaño”

La presidenta de FORO, Cristina Coto, concluyó que “si nunca es aceptable la pasividad del máximo responsable del Gobierno del Principado ante los problemas que aquejan a Asturias, Santa Bárbara es el caso extremo en el que el silencio de Javier Fernández es un ejemplo de su huida de la realidad de Asturias, y su actitud al inhibirse se convierte en un acto de complicidad intolerable”.