En una nota de prensa, las Asambleas han señalado que la Universidad les comunicó este cierre a los estudiantes el pasado sábado ofreciéndoles la alternativa a los que deseen quedarse en Asturias de hospedarse en una residencia religiosa, en la que no disponían ni de agua ni luz, por un precio de 9 euros diarios. Finalmente, la Universidad les ha ofrecido la opción de permanecer estos días en la residencia deportiva situada en Brañillin (Pajares). "Un pueblo que apenas cuenta con 7 habitantes y que, además de estar a 60 kilómetros de Oviedo y no disponer de transporte público diario, carece de instalaciones y servicios imprescindibles", han señalado los estudiantes.

   El órgano estudiantil ha manifestado que, "además de las consiguientes molestias para quienes decidan trasladarse allí", estas medidas de la Universidad, "escudándose en el ahorro y la gestión 'eficiente' de los recursos", "únicamente perjudican" a los estudiantes.

   Desde el colectivo, han apuntado también que esta situación no es "nueva" ya que, en las vacaciones de Navidad ya "pasó lo mismo". En esta línea, han criticado el cierre de todas las instalaciones de la Universidad de Oviedo durante el periodo vacacional (como salas de estudio o bibliotecas) con la "merma académica que esto supone".

   En su comunicado, las Asambleas Abiertas han exigido que se reabran inmediatamente las residencias de la Universidad de Oviedo y para que los estudiantes que lo "necesiten" puedan utilizar las instalaciones y han pedido a la directora de Colegios Mayores de la Universidad de Oviedo, Ana Bernardo, así como al equipo rectoral, que den "explicaciones públicas" por estas situaciones "rocambolescas".