Por Tony Philips
NSA
Usando datos proporcionados por el observatorio Explorador Infrarrojo de Campo Amplio para Sondeo (Wide-field Infrared Survey Explorer o WISE, en idioma inglés), de la NASA, un grupo de astrónomos ha descubierto seis estrellas "enanas tipo Y" —cuerpos celestes similares a las estrellas, pero con temperaturas tan bajas como la del cuerpo humano.
Los astrónomos habían buscado estos oscuros objetos durante más de una década sin éxito. Cuando se los observa con un telescopio en el intervalo de la luz visible, son casi imposibles de detectar. La visión infrarroja del telescopio WISE permitió al fin detectar el débil brillo de media docena de estrellas enanas tipo Y ubicadas relativamente cerca del Sol, a una distancia aproximada de 40 años luz.
"El telescopio WISE realizó una exploración de todo el cielo para buscar estos y otros objetos, y fue capaz de detectar su tenue presencia usando su visión infrarroja de alta sensibilidad", dijo Jon Morse, quien es el director de la División de Astrofísica (Astrophysics Division, en idioma inglés), ubicada en las oficinas centrales de la NASA, en Washington.
Las enanas tipo Y son los miembros más fríos de la familia de las estrellas enanas marrones. A las enanas marrones en ciertas ocasiones se las llama también estrellas "fallidas". Son demasiado bajas en masa como para fusionar átomos en sus núcleos y, por lo tanto, no queman material del mismo modo en que lo hace una estrella como nuestro Sol, el cual se ha mantenido brillando de manera continua durante miles de millones de años. En cambio, estos objetos se enfrían y se apagan con el tiempo, hasta que la poca luz que emiten solamente puede ser detectada en las longitudes de onda del infrarrojo. Las atmósferas de las enanas marrones son similares a las de los planetas gaseosos gigantes como Júpiter, pero son más fáciles de observar a distancia porque comúnmente se encuentran aisladas en el espacio, lejos de la luz cegadora de una estrella primaria.
Hasta hoy, los datos proporcionados por el telescopio WISE han revelado la existencia de cien nuevas estrellas enanas marrones. De esas cien, seis son clasificadas como enanas tipo Y frías. Una de estas enanas Y, identificada como WISE 1828+2650, ostenta el récord de ser la estrella enana más fría que se conoce, con una temperatura atmosférica estimada menor que la temperatura ambiente típica en un interior, es decir menos de 25 grados Celsius (80 grados Fahrenheit).
"Las enanas marrones que encontrábamos usualmente antes de este descubrimiento tenían una temperatura más parecida a la de un horno de cocina", dice Davy Kirkpatrick, quien es miembro del equipo científico de WISE, en el Centro de Procesamiento y Análisis de Datos Infrarrojos (Infrared Processing and Analysis Center o IPAC, en idioma inglés), en Caltech. "Con el descubrimiento de las enanas Y, nos hemos trasladado desde la cocina hacia las otras partes más frescas de la casa".
Las enanas tipo Y se encuentran en la vecindad de nuestro Sol; están ubicadas a una distancia de entre 9 y 40 años luz. La estrella Y que se encuentra a 9 años luz, identificada como WISE 1541-2250, podría convertirse pronto en la séptima estrella más cercana al Sol, desbancando a la estrella Ross 154 y ubicándola en el octavo lugar. A modo de comparación, la estrella más cercana a nuestro sistema solar es Próxima Centauri, la cual se halla a aproximadamente cuatro años luz de distancia.
"Encontrar enanas marrones cerca del Sol es como descubrir que hay una casa escondida en la calle donde uno vive, y que nunca antes habíamos notado", dice Michael Cushing, quien es miembro del equipo WISE en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (Jet Propulsion Laboratory o JPL, en idioma inglés), de la NASA. "Es excitante para mí saber que hay vecinos allí afuera a los que aún no hemos saludado. Con el observatorio WISE, podríamos incluso encontrar una estrella marrón más cercana a nosotros que la estrella más cercana que ahora conocemos".
Una vez que el equipo del telescopio WISE identificó a las estrellas marrones candidatas, utilizó el Telescopio Espacial Spitzer de la NASA con el fin de acortar la lista. Para hacer la confirmación definitiva, el equipo del telescopio WISE usó algunos de los telescopios y espectrógrafos más poderosos que existen sobre la Tierra con el propósito de dispersar la luz de estos objetos y buscar pistas inequívocas de moléculas de agua, metano y posiblemente amoníaco. En el caso de las enanas tipo Y más frías, el equipo usó el Telescopio Espacial Hubble de la NASA. Las enanas Y fueron identificadas tomando como base un cambio en estas marcas espectrales (comparadas con las de otras enanas marrones), el cual indica que tienen una temperatura atmosférica menor.