La plataforma Asturias Ganadera ha denunciado este jueves públicamente "la mala gestión" por parte del Gobierno asturiano del brote de tuberculosis bovina que ya afecta a más de 200 ganaderías. El colectivo ha asegurado que se ha ignorado un informe del Servicio Regional de Investigación Agroalimentaria (Serida), que considera a la fauna salvaje como posible vector de la enfermedad.
En una rueda de prensa, Xuan Valladares, Anselmo García y otros representantes de la plataforma han reclamado la detección y el control poblacional de las especies salvajes que estén ocasionando el contagio a las vacas, basándose en ese estudio fechado en 2012. Dos de ellas podrían ser los jabalíes y los tejones.
Valladares ha asegurado que ha estado presente en varias conferencias organizadas por la Consejería en las que se trató este asunto y en ellas se descartaba la influencia de la fauna salvaje. "O bien, los responsables de Agroganadería desconocen los informes de sus propios organismos o bien nos están mintiendo", ha asegurado.
Según los datos con los que cuenta Asturias Ganadera, el número de ganaderías afectadas está aumentado considerablemente año tras año y se reparten por muchos concejos asturianos, entre ellos Piloña, Parres, Colunga, Nava y Caso.
Además del análisis de la afección causada por la fauna salvaje y los potenciales controles poblacionales, los ganaderos reclaman otras medidas, tales como los test a los animales de las ganaderías afectadas antes de desplazarlos de una a otra zona de pasto.
A juicio de Anselmo García, esta "mala gestión" responde a la falta de una auténtica política activa de desarrollo rural, "que está condenando a la ganadería asturiana a la desaparición".
Entre otras problemáticas que ha comentado, y que denunciarán en la manifestación que celebrarán el próximo día 18 en Oviedo, está la "matorralización" del monte asturiano, que está reduciendo las hectáreas disponibles y en consecuencia el acceso de los ganaderos a las ayudas de las PAC.
Preguntado por los periodistas, Valladares también se ha referido a la conclusión del sistema de cuotas lácteas el próximo 31 de marzo, que será, a su juicio, "la puntilla del sector lechero". "Todo quedará en manos de cuatro ganaderías con 2.000 vacas cada una, y la pequeña producción tradicional desaparecerá", ha augurado.