El Juzgado de lo Penal número 3 de Oviedo ha condenado a cinco mineros, Juan Antonio D. R., Arturo D. R., Diego V. G., Víctor L. P. y Miguel Ángel A. G., a dos años y seis meses de prisión por la agresión a un ingeniero de Uminsa. Han sido condenados como autores responsables de un delito de atentado, otro de daños y una falta de lesiones, concurriendo el agravante de abuso de superioridad.
El juez ha considerado como hechos probados que en la tarde del día 12 de julio de 2012 se produjo un accidente en la explotación minera 'Mina de Cerredo'. Ya en la madrugada del siguiente día, cuando R. R.G., ingeniero técnico en dicha explotación, se dirigía junto con los mineros que habían sido rescatados, desde la mina hasta el denominado 'Piso 0', lugar donde se encontraban los vestuarios, fue seguido por numerosas personas en diversos vehículos.
A mitad de camino fue interceptado por dos vehículos que se cruzaron para impedirle el paso. Una vez que se detuvo, fue rodeado por una multitud de personas que superaba el centenar formando parte de ella estaban Juan Antonio S.R, Arturo S.R., Diego V.G., Víctor Luis P.R. y Miguel Ángel A.G., todos ellos mayores de edad y con antecedentes penales, excepto Diego V.C. y Miguel Ángel V.G., quienes, actuando en unión de una treintena de personas, zarandearon el vehículo, tratando de volcarlo, y le propinaron múltiples puñetazos y patadas tanto al coche como a R.R.G., al cual intentaban sacar a la fuerza del interior al tiempo que proferían contra el mismo insultos y amenazas.
Como consecuencia de la agresión, R. R. G., sufrió traumatismo craneoencefálico, además de varias contusiones y heridas. Los acusados sostenían que el ingeniero agredido "pretendía evitar el auxilio a los accidentados tras 12 horas atrapados" manifestando que "quería desplazar en su propio vehículo, sin atención médica, a los trabajadores".