En la operación han sido detenidos 12 integrantes de la organización entre los que se encuentran los cabecillas de la misma
La organización tenía previsto introducir semanalmente 100 kilos de “speed” en España, vía Francia o Países Bajos, utilizando camiones que realizan rutas comerciales
En los 12 registros practicados se han incautado también 250 gramos de cocaína, casi 5 kilos de sustancia de corte, anabolizantes, ketamina, 215.321 euros en metálico, 6 balanzas de precisión, vehículos de alta gama, joyas, ordenadores, armas y chalecos antibala
La Guardia Civil en la denominada operación “Cafeto”, llevada a cabo en Cantabria, ha desarticulado una organización especializada en el tráfico de speed a nivel internacional. Se procedido a la detención de 12 integrantes de la misma, entre los que se encuentran sus cabecillas y se han intervenido más de 100 kilos de “speed”, 250 gramos de cocaína, cerca de 252 gramos de hachís, 5 kilos de sustancia de corte y 215.321 euros en metálico.
La operación comenzó en agosto del pasado año y las primeras investigaciones dieron como resultado la localización de parte de la organización establecida en Cantabria, que se dedicaba al corte, preparación y distribución de la cocaína.
La organización
Contaban con una organización perfectamente estructurada y jerarquizada, con diferentes misiones como viajar a Francia y Países Bajos para negociar la compra de la droga con grandes “mayoristas”, mientras que el traslado de la mercancía lo realizaban terceras personas.
Los integrantes de la red mantenían unas escrupulosas medidas de seguridad para intentar burlar la acción de las fuerzas de seguridad, tales como evitar las conversaciones telefónicas entre ellos. El jefe de la organización cambiaba semanalmente de teléfonos, utilizando hasta tres números a la vez.
Entre otras medidas de seguridad, se realizaban reconocimientos y vigilancia de la zona donde se tenía previsto mantener los contactos, montando estos dispositivos incluso horas antes de los encuentros, con el objeto de detectar la presencia de efectivos policiales.
Camiones de rutas comerciales
Una vez descubierta la cúpula de la organización y ante el convencimiento de que estaba previsto que llegara una importante partida de estupefacientes, la Guardia Civil interceptó el pasado 2 de abril, en el puente internacional de Biriatou, frontera franco-española en Guipúzcoa, un camión con domicilio social en Cantabria, que transportaba ocultos en su cabina 99 paquetes de “speed” procedentes de Holanda, que han arrojado un peso de 102 kilos de la citada sustancia, procediéndose a la detención del conductor del camión.
Los investigadores pudieron saber que el responsable de la organización había convocado una reunión a raíz de la intervención del “speed”, por lo que la Guardia Civil montó un dispositivo dando como resultado su detención junto con otros 5 integrantes de la organización, realizándose la intervención el 4 y 5 de abril.
Se ha podido saber que el responsable de la organización mantenía contactos con personas en Holanda con la finalidad de introducir 100 kilos de “speed” semanalmente a España, considerando a esta persona presuntamente como uno de los mayores traficantes de esta sustancia en nuestro país.
Los días 11 y 12 de abril se detuvo a otras 5 personas y se realizaron varios registros que dieron como resultado la intervención de diversas cantidades de droga y de dinero en metálico.
Registros, droga y efectos incautados
En total se han realizado 12 registros en las localidades Cántabras de Laredo, Guarnizo, Treto, Suances, Colindres, Argoños, Santoña y Ampuero, donde se ha intervenido casi 250 gramos de cocaína, cerca de 252 de hachís, 22,9 de cristal, casi 5 kilos de sustancia de corte (supuestamente cafeína), anabolizantes, ketamina, 215.321 euros en metálico, 36 teléfonos móviles, 6 balanzas de precisión, vehículos de alta gama, joyas, ordenadores, armas blancas y de fuego simuladas y chalecos antibala.
Con los 102 kilos de “speed” intervenidos, considerados la mayor incautación en el presente año en España y de las mayores de los últimos 20 años, se podía haber puesto en circulación casi un millón de dosis de este estupefaciente.
Esta operación ha impedido el suministro de “speed” no solo en Cantabria, sino también al resto de la geografía nacional, con especial incidencia en el País Vasco, Burgos, Valladolid, Asturias, Madrid y Cádiz, entre otros lugares.