Desde la noche del 21 de diciembre de 2014, desapareció en Ciudad Altamirano el padre Gregorio López Gorostieta, formador del Seminario Mayor “La Anunciación”. El padre Gregorio llegó al Seminario en compañía de un seminarista aproximadamente a las once treinta de la noche, después de haber estado en la Iglesia Catedral donde celebró varias Misas durante el domingo y concluyeron su trabajo con una Pastorela y Kermess en beneficio del Seminario. Esto se realizó en el contexto de la Colecta Anual Diocesana a favor del Seminario.
Al recabar las versiones de los seminaristas y las hermanas religiosas se llegó a la conclusión, que personas ajenas al Seminario, estuvieron revisando las instalaciones por la tarde noche del domingo. Algunos seminaristas que iban llegando de las diferentes parroquias, vieron entre la oscuridad que algunas personas extrañas merodeaban el lugar. Todo indica que al padre Gregorio lo obligaron a salir en su camioneta.
El lunes por la noche, nuevamente gente ajena al Seminario intentó entrar a la casa de las Hermanas Religiosas, logrando escapar al verse descubiertos.
Ciudad de México (Agencia Fides) – Durante los últimos 24 años se han cometido 47 ataques contra miembros de la Iglesia Católica, de los cuales 45 son delitos menores y 2 corresponden a sacerdotes desaparecidos de los que no se tiene ninguna noticia. Estos datos indican, por desgracia, que México se ha convertido en el país más peligroso de América Latina, donde ejercer el ministerio sacerdotal a día de hoy. Lo pone de manifiesto el Centro Católico Multimedia (CCM), que pertenece a la Conferencia Episcopal Mexicana, y que acaba de publicar su informe anual de 2014, que enumera a los sacerdotes, religiosos y laicos mexicanos que han perdido la vida en México”, debido a su acción pastoral eficaz y al sentido de fidelidad absoluta a Cristo y a su Iglesia”, refiere la nota enviada a la Agencia Fides desde el CCM.
El informe presenta la lista de los agentes pastorales que han muerto de forma violenta en México desde 1990 hasta 2014: 1 Cardenal, 34 sacerdotes, 1 diácono, 3 religiosos, 5 laicos y 1 periodista católica. También registra un aumento de estos casos durante la administración del último gobierno de Enrique Peña Nieto.
Sólo en 2014 se cometieron 3 asesinatos de sacerdotes, y un ataque contra un laico que acompañaba a un sacerdote. Este último sobrevivió a un tiroteo, tras un intento de secuestro fallido. En los últimos 12 meses, dos sacerdotes de la Archidiócesis de Acapulco, Guerrero, han pagado con su vida el secuestro por parte de grupos violentos. Otro sacerdote de la Diócesis de Atlacomulco, Estado de México, fue asesinado durante un robo perpetrado en la iglesia de la que era párroco (CE)
FOTO: Dióscesis de Altamirano