Bilbao (E.P.) .-La Sociedad para el Estudio y la Conservación de la Fauna Marina (AMBAR) ha advertido de la posible aparición de focas grises en la costa vasca en próximos días y ha recomendado "no tocarlas" porque "pueden causar auténticos destrozos". El pasado año, debido a la sucesión de temporales, se localizó alrededor de medio centenar de ejemplares en toda la costa de Euskadi.

   Según ha explicado a Europa Press el vicepresidente de Ambar, Enrique Franco, en el País Vasco las focas suelen aparecer en época de Santo Tomás, y en Asturias y Galicia ya se han avistado los primeras. Por ello "es muy probable" que lleguen a Euskadi en unos días.

   "Parece ser que la especie se está extendiendo hacia el sur, hay muchos ejemplares, y es muy probable que nos lleguen. Que la gente esté preparada, porque llegarán", ha afirmado.

   Las juveniles de foca gris son animales salvajes y tienen unos dientes "que pueden hacer auténticos destrozos", además de "una saliva" que produce infección en las heridas. Además, "suelen ser portadoras de enfermedades transmisibles a los humanos".

   Por ello, la asociación recomienda que, al localizar uno de estos animales, se llame al 112 desde donde alertarán a Ambar para estudiar si lo retiran o no. También aconseja respetar "una distancia prudencial" para que la foca "no se sienta acosada" y encuentre "una vía de escape al agua".

"PELUCHES"

   En caso de encontrase junto a un perro, se le debe mantener "bien atado". "Nunca hay que acercarse, porque aunque parecen peluches pueden hacer auténticos destrozos y transmitir enfermedades", ha insistido.

   Según Franco, "tomando las precauciones debidas no tienen por qué producirse problemas". Ambar retira, además, solo los ejemplares que se encuentren enfermos o heridos.

EN ROCAS Y PLAYAS

   Las focas podrían aparecer en cualquier punto de la costa, tanto en rocas como en playas. "Lo normal es que se avisten al atardecer, porque salen a descansar, y a mitad de la noche o al amanecer vuelven al agua", ha manifestado.

   Sin embargo, el año pasado, en que vinieron a Euskadi un número importante de ejemplares, alguna focas llegaron a subir las escaleras del puerto de Getaria. "Se quedaban arriba descansando y luego volvían al mar", ha recordado Franco.

   En 2013, debido a los grandes temporales que se registraron en el Norte, se localizaron numerosas focas grises, alrededor de un medio centenar, en toda la costa vasca. De repetirse las condiciones meteorológicas, podría volver a ocurrir lo mismo.

   Ambar, instituciones y autoridades ya se han puesto en contacto en previsión de la llegada de los ejemplares de foca y se encuentran elaborando un protocolo de actuación.