"Presupuestar 116.000 euros para un muerto no tiene sentido", ha indicado Álvarez, que ha añadido que "más del 80% es para salarios, no hay actividad y para lo que hay puede hacerse desde la UCAYC o la Cámara de Comercio de Avilés".

   El resto de partidas planteadas pasan por rehabilitar viviendas sociales, urbanizar la calle González Abarca, dotar de wifi a los centros de estudio y bibliotecas y ofertar ayudas para la mejora de fachadas y eficiencia energética. El PP también pide más ayudas de emergencia e incrementar las de licencias de apertura, así como mantener abierta todo el año la convocatoria del IBI social.

   La décima medida de los populares supone convertir en una inversión plurianual la reforma de Santa Apolonia, presupuestada en 1,3 millones de euros para 2015. "No se va a gastar ese dinero en un año y es mala gestión tenerlo parado", ha dicho Álvarez. También ha apuntado que el resto de medidas planteadas tendrían un coste total de medio millón de euros, por lo que serían viables.

   Aréstegui ha indicado que "con la situación de crisis hay que pensar más en los ciudadanos que en la ciudad y mejorar su calidad de vida. Son tiempos de solidaridad y ha de reflejarse en los presupuestos". Ha señalado que sus propuestas "no son demagógicas ni irreales, con lo que pensamos sean bien acogidas" y ha confiado en que "el gobierno socialista sea receptivo a nuestras propuestas, porque es mejor tener presupuesto que no incertidumbre".