El programa para la erradicación del dengue (Eliminate Dengue Project), que desarrolla un nuevo enfoque para reducir los efectos de esta enfermedad en el mundo, comienza a dar sus frutos. El equipo de investigación consiguió introducir la bacteria Wolbachia en poblaciones salvajes del mosquito transmisor del dengue para reducir su capacidad de contagiar el virus a las personas.
Dos nuevos estudios revelan el éxito de los ensayos de control biológico con poblaciones salvajes de Aedes aegypti, el mosquito que transmite el virus del dengue. Los trabajos, publicados en Nature, suponen un nuevo enfoque para reducir su infección en el mundo.
El equipo científico consiguió introducir la Wolbachia, una bacteria que reduce la sensibilidad del mosquito al virus del dengue, en poblaciones salvajes del insecto. “Se trata de la primera liberación intencional de mosquitos infectados por la bacteria Wolbachia en la naturaleza para reemplazar a una población de insectos existente”, explican los autores, que afirman que si estos resultados son repetibles, “existe la posibilidad de que se produzcan reducciones drásticas en la incidencia de virus del dengue”.
Estos resultados son el trabajo del programa para la erradicación del dengue (Eliminate Dengue Project), dirigido por Scott O’Neill, de la Universidad de Monash (Australia), en el que colaboran institutos de investigación de Australia, Vietnam, Tailandia, EE UU y Brasil.
Los métodos de control actuales no consiguen detener este problema de salud mundial
Los métodos de control actuales, basados en el uso de insecticidas, no consiguen detener este problema de salud mundial. Sin embargo, “los métodos que utilizan la Wolbachia son fáciles de usar y podrían ser la clave de un nuevo enfoque sostenible para controlar el dengue, que debería adaptarse a las grandes ciudades del mundo desarrollado, en las que las medidas de control convencionales han resultado poco efectivas y costosas. El método también debería ser compatible con las vacunas cuando se empiecen a utilizar”, afirma O’Neill.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que 2.500 millones de personas viven en zonas de transmisión del dengue y se registran más de 50 millones de casos al año.
Hasta ahora, los experimentos realizados durante años demostraron que se podía introducir la Wolbachia en el mosquito en el laboratorio, sin embargo, los artículos publicados esta semana describen además la exitosa introducción de la misma cepa de Wolbachia en poblaciones salvajes de mosquito de Australia.
Efectividad en cinco semanas
En enero de este año, los investigadores liberaron mosquitos portadores de la Wolbachia en Yorkeys Knob y Gordonvale, dos zonas de las afueras de Cairns, en Queensland (Australia). En tres meses, la Wolbachia había invadido completamente las poblaciones locales de mosquito.
“El ensayo de campo implicaba liberar mosquitos con Wolbachia cada semana durante más de dos meses. Cinco semanas después de haber liberado a los mosquitos, se calculó que el 100% de los mosquitos de Yorkeys Knob y el 90% de los de Gordonvale portaban la Wolbachia. Fue un gran día”, señala O’Neill.
Los autores prevén realizar más ensayos cuando el tiempo sea más húmedo, a fin de analizar si la Wolbachia se extiende a zonas menos controladas que las primeras en que se realizó el ensayo. Tras el éxito, se está intentando conseguir autorización legal para realizar ensayos en Tailandia, Vietnam, Brasil e Indonesia que determinen directamente la eficacia del método a la hora de reducir la incidencia de dengue en las poblaciones humanas.
Imagen:Eliminate Dengue Program