"La playa de San Lorenzo quedó condenada en el momento que se construyó el paseo marítimo encima de su zona seca y por lo tanto destruyendo su reserva natural de arena. Lo único que han producido las sucesivas ampliaciones del puerto son cambios en la forma en planta de la playa"
Gijón/Xixón.- (E.P.) .-El ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, el asturiano Roberto Díaz Sánchez, propone nuevos parámetros para reducir costes y mejorar la calidad de obras desarrolladas en el litoral frente al cambio climático en su tesis doctoral, que ha defendido esta semana en la Universidad Politécnica de Madrid.
En el trabajo, titulado 'Predicción del remonte extremo en playas, aplicación a los sectores litorales de la costa española', este doctor ingeniero, natural de Gijón, recomienda la reformulación de los valores utilizados tradicionalmente para obtener el 'remonte extremo' con el propósito de que resulte más eficiente y permita optimizar las actuaciones costeras bajo criterios más exigentes de sostenibilidad económica y socio-ambiental.
El 'remonte extremo' o 'remonte al 2%' es un parámetro clave en la ingeniería costera para "determinar adecuadamente los límites de la ribera del mar" a la hora de formular el diseño de estructuras en playas o planes de actuación urbanística, explica Roberto Díaz en declaraciones a Europa Press.
De este modo, su tesis supone un avance respecto a parámetros anteriores ya que hasta hace poco no se demandaban "formulaciones tan precisas". "Antes no existía la necesidad actual de ahorrar recursos ni se percibía la amenaza del cambio climático, que implica tormentas cada vez más frecuentes y de mayor magnitud que pueden provocar daños, como los dos temporales que azotaron este año la costa asturiana", ha apuntado sobre la pertinencia de su propuesta.
"Lo que permite esta nueva formulación es acometer actuaciones contra los efectos del cambio climático sin malgastar recursos", ha resaltado Roberto Díaz, para quien éste es uno de los principales riesgos que afecta a la costa española junto con la presión demográfica.
Según el experto, "la necesidad de encontrar nuevos negocios para el desarrollo económico atrae actividades a la costa, que es una zona de alto valor socio-ambiental, por ello es imprescindible disponer de una herramienta para que las administraciones puedan decir hasta dónde se puede construir". "Si no respetamos el límite hasta donde se podría inundar una playa, posteriormente tendríamos que enfrentarnos a pagar indemnizaciones y reconstruir infraestructuras, lo que supone un despilfarro", advierte.
Así, los problemas a los que se enfrenta la costa están ligados "a la mala planificación urbanística y al cambio climático", desde una posible pérdida permanente de arena, al cambio en la forma de las playas, la modificación del oleaje, daños en paseos marítimos y edificios situados cerca de la línea de costa o la ampliación de las zonas inundables.
SALINAS, SAN LORENZO Y EL MUSEL
Ante estos riesgos, Roberto Díaz Sánchez analiza la situación de dos de las playas más vulnerables de la costa asturiana, Salinas y San Lorenzo, para concluir que la causa de sus problemas fue su mala urbanización. "Salinas, como playa abierta, está en peor situación que San Lorenzo que, al menos, cuenta con la protección de El Musel para hacer frente a algunos temporales", añade.
"La situación de los arenales de San Lorenzo y Salinas es crítica debido a que los paseos marítimos se situaron literalmente encima de la playa reduciendo considerablemente la arena con la que contaban las playas para defenderse de los temporales", remarca este doctor ingeniero.
De hecho, sostiene que la playa de San Lorenzo "no ha perdido arena por la construcción del puerto del Musel en ninguna de sus fases, puesto que las actuaciones desarrolladas se han desarrollado suficientemente lejos del arenal y por lo tanto mucho más allá de su profundidad de cierre".
"La playa de San Lorenzo quedó condenada en el momento que se construyó el paseo marítimo encima de su zona seca y por lo tanto destruyendo su reserva natural de arena. Lo único que han producido las sucesivas ampliaciones del puerto son cambios en la forma en planta de la playa", argumenta, afirmando que "la última ampliación ha cambiado el régimen de oleajes que llega a la playa aumentando su protección frente a los oleajes del noroeste, que son los de mayor magnitud".
Al respecto, Roberto Díaz ha destacado la investigación del Centro de Estudios de Puertos y Costas del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (Cedex), sobre el probable cambio en el largo plazo de la forma en planta de la playa de San Lorenzo. "Podremos conocer con mejor precisión hacia dónde se está moviendo el arenal, aunque en ningún caso debe entenderse esto como una pérdida de arena", asevera.