Ya estamos en la diecinueve edición y parece que fue ayer cuando, inspirado en el “Otoño Romántico de Sheffield, se me ocurrió poner en marcha la “Noche Mágica del Esfoyón y el Amagosto” en Navelgas de Arriba; ¿ porque aquí ? Simplemente porque se mantiene el marco natural de caleyas, paneras... y hace diecinueve años, también campesinos, ahora o faltan o son pensionistas.

                        Recuerdo aquel primer año de luna llena, con Claudio y María, quienes junto a Alicia, su hermana Carmen el resto de la familia y el resto de los vecinos, fueron capaces de representar, a través de la magia y la ilusión, una película de los tiempos pasados. Hoy, apenas nos quedan artesanos en la comarca, ya hay que acudir a otros entornos para conservar la pureza, la verdad que la juventud se mueve bien para conseguir, mientras sea posible, que vengan los auténticos constructores del mundo rural; esto lo hacen bien en Santirso de Abres, dando clase de artesanía a todos cuantos quieren evitar la perdida de los viejos oficios.

                        El sábado ocho, también como hace diecinueve años, la noche se iluminará, ademas de por las antorchas, la fragua, el forno y el fuego para los tambores en donde se asan las castañas, se iluminará, digo, por esa luz de plata que emite la luna llena, entre aullidos de lobos y leyendas de “tsariegas”.

                        Las panoyas de maíz, se van desnudando de sus fuellas, ofreciendo su cuerpo dorado a las “velas” de paja de trigo o centeno con las que se van formando las riestras, trenzadas con gran maestría, para, posteriormente, colgarlas en los corredores de las paneras luciendo resplandecientes, el alimento de los dioses mayas quienes han tenido la gentileza de enviarnos esos granos que valen su peso en oro, para salvar las hambrunas que inundaron nuestra tierra y ahora la amenazan de nuevo.

                        Castañas, traidas por los romanos para alimento de esclavos que trabajaban en las minas de oro y con la madera del castaño construimos nuestros horreos y paneras, además de obtener, junto con las de los avellanos, las blindas para para los maniegos o paxios y  cestas, tejidas  con xalgueiros.

                        La Comarca de Navelgas, hoy en recesión y decaída, fué un gran potencial como despensa, en Asturias, prueba de ello la tenemos en la escasez de horreos, de poca capacidad, y la abundancia de paneras de gran tamaño.

                        Un año mas vamos a revivir, Navelgas, las tradiciones en la Noche Mágica del Esfoyón y el Amagosto, esperemos que la luz lunar no nos confunda.