Oviedo (E.P.) .-Los Reyes de España presiden en el Teatro Campoamor  la ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias de la presente edición. A su llegada, Don Felipe y Doña Letizia escucharon el sonido de las bandas de gaitas y el de los aplausos de los ciudadanos que les esperaban. Pero también los fuertes abucheos de cientos de personas que se unieron a una protesta convocada por CSI en Cajastur.

   Silvidos, gritos de 'fuera, fuera', 'vergüenza', 'fartones, lemas como 'borbones a los tiburones'  o 'menos policía, más trabajo' se podían escuchar mientras los Reyes saludaban al Alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo y al presidente de la Fundación Príncipe de Asturias, Matías Rodríguez Inciarte.

   Los manifestantes se encontraban en un lugar cercano, pero custodiados muy de cerca por un amplio despliegue policial. Un exconcejal de IU del Ayuntamiento de Oviedo, Celso Miranda, que se encontraba en una zona próxima sacó a la llegada de los Reyes una bandera republicana, pero la Policía se la quitó.

   A pesar de las protestas, la ceremonia ha comenzado conforme al horario previsto. En el exterior, los manifestantes continuaban en la Plaza de la Escandalera.

Los organizadores de la manifestación de la Plaza de La Escandalera presentan una denuncia por vulneración de derechos

Los organizadores de la manifestación que tiene lugar desde las 17.00 horas en la Plaza de la Escandalera de Oviedo, lugar cercano al teatro donde este viernes se celebra la ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias, han decidido presentar una denuncia al entender vulnerado su derecho a manifestarse.

   La Corriente Sindical de Izquierda (CSI) en CajAstur tenía autorizada la manifestación el la Plaza de la Escandalera, en una convocatoria autorizada por el Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA).

   El problema ha surgido cuando los cientos de manifestantes que se dieron cita en la plaza se encontraron con buena parte de la misma, la más cercana a la zona por la que llegaban los asistentes a la ceremonia, estaba vallada o se les impedía el acceso por parte de un amplio despliegue policial.

   De nada sirvieron las negociaciones que mantuvieron Juan Manuel Martínez Morala y Marco Antuña con los mandos de la Policía. En vista de que no se llegaba a una solución, los convocantes decidieron dirigirse a los juzgados para interponer la correspondiente denuncia al entender que se vulneraba sus derechos. Mientras, los abucheos a los asistentes, las banderas republicanas y los lemas coreados por los manifestantes contra las instituciones continúan en un espacio muy próximo al que pisarán en unos minutos los Reyes de España para acceder al Teatro.

 FOTO: IU twitter