Dirigente de Izquierda de Asturias e Izquierda Unida Federal han mostrado este viernes su apoyo a las Marchas por la Dignidad, que se acercan a Oviedo para confluir en una concentración de protesta que tendrá lugar en la Plaza de la Escandalera, coincidiendo con la celebración de los Premios Príncipe de Asturias.

   Para la organización, las marchas "son la demostración de la situación de precariedad en la que vive la sociedad española y del hastío de la ciudadanía del régimen. Al menos, así lo aseguran los máximos responsables de IU, que, a esta hora, esperan en Lugones por la columnas procedentes de Gijon, Avilés y Siero".

   El coordinador general de IU Asturias, Manuel González Orviz resaltó que esas movilizaciones "responden a la respuesta de una parte de la sociedad que reclama otro modelo más justo, que incluye la república como forma de estado, pero con una clara defensa de los derechos sociales, políticos y económicos de la mayoría algo que, dijo, en estos momentos está en quiebra".

   Por su parte, el senador de IU por Asturias, Jesús Iglesias, resaltó que "el lema "somos reales" pretende sacar de la invisibilidad a millones de personas que ven, cada día, como sus necesidades quedan postergadas. De hecho, las marchas de hoy suponen también la exigencia de pan, techo y trabajo como inexcusables, explicó el parlamentario".

   En la recepción a los manifestantes también estaba el diputado Nacional Gaspar Llamazares, quien rechazó "las trabas que se están poniendo al derecho a la manifestación ciudadana bajo la excusa de la seguridad. El derecho de manifestación forma parte de los derechos fundamentales, no así la seguridad, por lo que, enfatizó, lo que tiene que hacerse es adaptarse ésta al respeto de un derecho irrenunciable para la ciudadanía".

   Por su parte, la coordinadora federal de IU de Convergencia, Lara Hernández, aseguró que las movilizaciones "son la demostración palmaria de que la crisis es real y con graves consecuencias para la ciudadanía. La unión de colectivos y formaciones políticas en estas marchas son, a su juicio un primer paso para la confluencia de aquellas organizaciones y personas que están dispuestas a luchar por un cambio del modelo social. "La confluencia empieza desde abajo, en la calle".