Elvira Cortajarena visitó la euskal etxea de Jujuy (Argentina)

Elvira Cortajarena visitó la euskal etxea de Jujuy (Argentina)

Continuando con el cronograma de visitas a las casas vascas del Mercosur, la Delegada Elvira Cortajarena se desplazó hasta la capital jujeña para visitar la euskal etxea del extremo noroeste de Argentina, a 1.650 km de Buenos Aires.

 

Cortajarena fue recibida por la colectividad vasca jujeña, encabezada por la Presidena de la euskal etxea Denak Bat María Celia Arostegui, con quienes compartió intereses y puntos de vista sobre la colectividad y la cultura vascas en este centro de 15 años de existencia.

Posteriormente, en el Centro cultural Héctor Tizón, la Delegada del Gobierno Vasco presentó la oferta turística de Euskadi a un nutrido grupo que, desafiando el frío invernal, asistió interesado en conocer las virtudes del País Vasco como destino turístico.

 

Durante su breve estancia en la ciudad de San Salvador de Jujuy, la Delegada Cortajarena también tuvo oportunidad de estrechar los lazos institucionales con el Ayuntamiento de la capital provincial durante una entrevista con el Alcalde Raúl Jorge. Durante el encuentro, el alcalde recalcó el interés en colaborar con Euskadi en temas de gestión turística, ya que en Jujuy reciben anualmente un número importante de visitantes en busca de conocer la Quebrada de Humahuaca.

 

Declarada Patrimonio Natural y Cultural de la Humanidad por la UNESCO, la Quebrada de Humahuaca tien 30 mil habitantes permanentes y recibe alrededor de 150 mil visitantes por año. La Delegada Cortajarena se desplazó hasta Humahuaca para conocer las localidades emblemáticas de la Quebrada: Punmamarca y Tilcara.

 

Durante su visita, Elvira Cortajarena conoció el taller de artesanías de la conocida artista local Berta Alonso, quien a tráves de la enseñanza de la reproducción de arte religioso colonial a jóvenes de bajos recursos, ha montado una de las actividades solidarias más destacadas de la ciudad (www.fundacionrecrear.com.ar).

Por su parte, el Centro Denak Bat ha colaborado con el Centro Toki Eder de José C. Paz y la localidad guipuzcoana de Oñati para la construcción de molinos de viento que permitieron llevar agua potable a la Comunidad Queta, ubicada en una de las áreas más áridas y duras de Argentina, a 3.800 metros de altitud.

 


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