Nike hace público su compromiso de “descontaminar” su cadena de producción y sus productos
Activistas de Greenpeace han realizado esta noche varias proyecciones en el estadio Camp Nou durante el partido de vuelta de la Supercopa de España, que enfrentaba al Barcelona y al Real Madrid.
La organización ecologista ha escrito mensajes para Adidas (empresa patrocinadora del Real Madrid y de jugadores como Leo Messi) para “desafiarle” a que acepte el desafío Detox y elimine las sustancias químicas peligrosas de su cadena de suministro y de sus productos si quiere llegar a ser el campeón un futuro libre de tóxicos. Algunos de los mensajes que se podía leer eran: “Contaminar no es juego limpio”, “Contaminar no és joc net” o “El mundo necesita más campeones”.
Hace unas horas Nike se ha comprometido a eliminar las emisiones de todas las sustancias químicas peligrosas, a lo largo de toda su cadena de suministro y durante todo su ciclo de vida para 2020 (1), siguiendo el desafío “Detox” de Greenpeace.
Esta respuesta de Nike llega cinco semanas después de que Greenpeace lanzara su informe Trapos Sucios, en el que identifica los vínculos comerciales entre las marcas de ropa más importantes (2), como Nike, Adidas y Puma, y los proveedores responsables del vertido de sustancias químicas tóxicas en los ríos de China (3). También Puma ha aceptado el reto de Greenpeace tan solo dos semanas después de la presentación del informe (4).
Adidas es la única de las tres marcas líderes en ropa deportiva del mundo que aún no ha asumido el reto de descontaminar su cadena de producción y sus productos, tras el anuncio esta tarde de la empresa estadounidense.
“Contaminar el agua no es juego limpio, es el momento de terminar con el vertido de sustancias tóxicas y para que también Adidas acepte el desafío Detox”, ha declarado Sara del Río, responsable de la campaña de Contaminación de Greenpeace. “Animamos a Adidas a que se comprometan a “descontaminar”. ¿Porqué Adidas no lo hace?. El mundo necesita más campeones. ”
Las investigaciones de Greenpeace proporcionan una instantánea de la clase de productos químicos tóxicos que vierte la industria textil en todos los cauces del mundo, y que son indicativos de un problema mucho mayor con consecuencias graves y de largo alcance para las personas y la vida silvestre, para el que propone estas soluciones.
La web del desafío DETOX es: http://www.greenpeace.es/detox
Notas:
(1) http://www.nikebiz.com/media/pr/2011/08/17_zero_discharge.html
(2) Las marcas a las que se le encontraron vínculos comerciales con las fábricas contaminantes son: Abercrombie & Fitch, Adidas, Bauer Hockey, Calvin Klein, Converse, Cortefiel, H&M, Lacoste, Li Ning, Meters/bonwe, Nike, Phillips-Van Heusen Corporation (PVH Corp), Puma y Youngor. Ninguna de estas empresas tiene una política de gestión de sustancias químicas adecuada que les permita tener una visión integral de las sustancias químicas que usan y vierten al medio ambiente a lo largo de toda su cadena de suministro, y actuar en consecuencia.
(3) La campaña se basa en una investigación de un año en China, que pusieron al descubierto las sustancias químicas persistentes, bioacumulativas y provocan alteraciones hormonales en los vertidos de los proveedores que tienen vínculos comerciales con las marcas. Estas sustancias químicas plantean amenazas a largo plazo para el medio ambiente y la salud humana y los resultados proporcionan una instantánea de un problema mucho más general que afecta a la industria textil. Lo que hace que muchos de estos químicos tan peligrosos es que no sólo son persistentes (es decir, que no se degradan fácilmente en el medio ambiente), sino también bioacumulables, (lo que significa que pueden acumularse en la cadena alimentaria y puede tener graves a largo, plazo sobre los organismos que los ingieren). En anteriores investigaciones de Greenpeace se han detectado también estas sustancias en algunas especies de peces a lo largo del río Yangtze:
http://www.greenpeace.org/eastasia/press/reports/swimming-in-poison-yangtze-fish
Hace unas horas Nike se ha comprometido a eliminar las emisiones de todas las sustancias químicas peligrosas, a lo largo de toda su cadena de suministro y durante todo su ciclo de vida para 2020 (1), siguiendo el desafío “Detox” de Greenpeace.
Esta respuesta de Nike llega cinco semanas después de que Greenpeace lanzara su informe Trapos Sucios, en el que identifica los vínculos comerciales entre las marcas de ropa más importantes (2), como Nike, Adidas y Puma, y los proveedores responsables del vertido de sustancias químicas tóxicas en los ríos de China (3). También Puma ha aceptado el reto de Greenpeace tan solo dos semanas después de la presentación del informe (4).
Adidas es la única de las tres marcas líderes en ropa deportiva del mundo que aún no ha asumido el reto de descontaminar su cadena de producción y sus productos, tras el anuncio esta tarde de la empresa estadounidense.
Las investigaciones de Greenpeace proporcionan una instantánea de la clase de productos químicos tóxicos que vierte la industria textil en todos los cauces del mundo, y que son indicativos de un problema mucho mayor con consecuencias graves y de largo alcance para las personas y la vida silvestre, para el que propone estas soluciones.
La web del desafío DETOX es: http://www.greenpeace.es/detox
Notas:
(1) http://www.nikebiz.com/media/pr/2011/08/17_zero_discharge.html
(2) Las marcas a las que se le encontraron vínculos comerciales con las fábricas contaminantes son: Abercrombie & Fitch, Adidas, Bauer Hockey, Calvin Klein, Converse, Cortefiel, H&M, Lacoste, Li Ning, Meters/bonwe, Nike, Phillips-Van Heusen Corporation (PVH Corp), Puma y Youngor. Ninguna de estas empresas tiene una política de gestión de sustancias químicas adecuada que les permita tener una visión integral de las sustancias químicas que usan y vierten al medio ambiente a lo largo de toda su cadena de suministro, y actuar en consecuencia.
(3) La campaña se basa en una investigación de un año en China, que pusieron al descubierto las sustancias químicas persistentes, bioacumulativas y provocan alteraciones hormonales en los vertidos de los proveedores que tienen vínculos comerciales con las marcas. Estas sustancias químicas plantean amenazas a largo plazo para el medio ambiente y la salud humana y los resultados proporcionan una instantánea de un problema mucho más general que afecta a la industria textil. Lo que hace que muchos de estos químicos tan peligrosos es que no sólo son persistentes (es decir, que no se degradan fácilmente en el medio ambiente), sino también bioacumulables, (lo que significa que pueden acumularse en la cadena alimentaria y puede tener graves a largo, plazo sobre los organismos que los ingieren). En anteriores investigaciones de Greenpeace se han detectado también estas sustancias en algunas especies de peces a lo largo del río Yangtze:
http://www.greenpeace.org/eastasia/press/reports/swimming-in-poison-yangtze-fish