Gijón (E.P.) .-Agentes de la Policía Local de Gijón se han enfrentado en las últimas horas a dos sucesos que han tenido a conductores de ciclomotores como protagonistas y a los que han tenido que perseguir para luego detenerlos por diferentes razones, según ha informado el Ayuntamiento de Gijón a través de una nota de prensa.
En el primero de los casos, registrado la pasada madrugada a las 2,48 horas, los policías vieron a una pareja que circulaba de forma anómala en un ciclomotor, por lo que pidieron al conductor que se detuviese. Comprobaron que tenía la ITV caducada. Cuando le pidieron la documentación para denunciarle, el hombre abandonó la moto y salió huyendo.
Intentó coger un taxi, pero al ver acercarse a los policías, que le perseguían, lo abandonó y salió corriendo. Tras recorrer varias calles fue alcanzado, pero ofreció fuerte resistencia. Se le hicieron las pruebas de alcohol y drogas, dando positivo en las segundas.
Además, los policías descubrieron que tenía una reclamación judicial. Así las cosas, le detuvieron por el delito de resistencia y desobediencia grave, por la reclamación judicial y le denunciaron por la ITV y por el positivo en drogas.
OTRO CICLOMOTOR
El otro caso en el que también un conductor de ciclomotor acabó detenido en la ciudad se produjo a las 3.15 horas del pasado viernes. Los policías fueron alertados de que un chico se había caído de la moto en Avenida de Galicia. Los policías lo localizaron a la altura de Cuatro Caminos.
El joven, cuando vio a los agentes, salió huyendo, haciendo caso omiso de las advertencias para que se detuviera. Comenzó entonces una persecución que terminó cuando el chico chocó contra un bordillo y se cayó.
Los policías le hicieron la prueba de alcohol y vieron que daba positivo. Se trata de A.G.J., un vecino de Gijón de 18 años. También descubrieron que el ciclomotor que conducía lo había robado horas antes. Por ello, se le detuvo.