Ante la caída de recursos y reservas y la bajada en la estimación del cálculo de vida de la explotación
Asturias (E.P.) .-Orvana Minerals, la empresa canadiense que gestiona las explotaciones mineras auríferas de El Val.le-Bueinás (Belmonte de Miranda) y Carlés (Salas) ha comunicado el cese temporal de actividad en la segunda, y el traspaso de los 65 empleados de esta explotación a la primera. Los motivos principales de esta medida, que se aplicará a finales de este año, son dos: una caída de la estimación de reservas y recursos que la firma canadiense considera "decepcionante" y una reducción de la esperanza de vida últil estimada de la instalación conjunta, que pasa a ser de cuatro años a partir del próximo mes de octubre, frente a los nueve calculados inicialmente.
A través de una nota de prensa, la compañía canadiense ha dado cuenta de la actualización RRM, que calcula los recursos y reservas, y la actualización del Plan de Vida Útil de la Mina (PVUM), cuyos resultados han conllevado la toma de esta decisión. Fuentes de la empresa han destacado que la medida no supone ninguna pérdida de empleo. La actividad mantendrá los 343 empleados con los que cuenta en ambas instalaciones, aunque todos ellos estarán ahora en la mina de Belmonte, que aumentará su actividad. Insisten además en que el cese es temporal. "Creemos que estas medidas, junto con una amortización notable de la deuda, nos permitirán mejorar el flujo de caja libre", apunta la nota de prensa.
La mina de El Val.le-Bueinás y Carlés (EVBC) presenta, según la compañía, una trayectoria de rendimiento insuficiente en relación con su producción aurífera frente al plan trazado. La caída en las reservas y recursos son decepcionantes. La decisión de Orvana en respuesta a la reducción de los recursos y reservas y los consiguientes ajustes en la vida útil de la mina constituyen medidas difíciles, aunque necesarias, ha explicado Michael Winship, presidente y consejero delegado de Orvana. Así pues, "la empresa optimizará la producción en la mina de Bueinás y se centrará en producir únicamente onzas rentables. La producción de Bueinás se verá aumentada, mientras que la mina de Carlés entrará en fase de mantenimiento a finales de 2014. Creemos que estas medidas, junto con una amortización notable de la deuda, nos permitirán mejorar el flujo de caja libre, ha señalado el directivo.
Según los datos de la actualización RRM las reservas contrastadas y demostrables serían aproximadamente de 2,2 millones de toneladas con una ley de 4,3 g/t de oro y 0,7% de cobre, que contienen 302.000 onzas de oro y 14.680 toneladas de cobre, lo que supone un descenso de alrededor del 66% y el 59%, respectivamente; los recurcursos calculados e indicados serían de unos 6,0 millones de toneladas con una ley de 4,4 g/t de oro y 0,7% de cobre, que contienen 850.900 onzas de oro y 41.500 toneladas de cobre, lo que supone un descenso de alrededor del 32% y el 22%, respectivamente; y los recursos inferidos: aproximadamente 6,0 millones de toneladas con una ley de 5,0 g/t de oro y 0,5% de cobre, que contienen 979.500 onzas de oro y 26.900 toneladas de cobre, lo que supone un descenso de alrededor del 22% y el 5%, respectivamente.
En lo que respecta al plan de vida, se estima una vida útil para la mina de EVBC de aproximadamente cuatro años, frente a los cerca de nueve años estimados anteriormente. La producción total de oro durante se prevé en alrededor de 282.200 onzas con unos costes de actividad medios por onza de oro vendida de 1.100 dólares sobre la vida útil estimada actualmente. Además se estima que los recursos minerales inferidos contengan 979.500 onzas de oro, lo genera oportunidades para ampliar la vida útil de la mina.
No obstante, Winship matiza que "la Dirección continuará centrándose en la perforación de delineación en EVBC, que históricamente nos ha permitido convertir los recursos minerales en reservas. Creemos que existe un potencial de crecimiento considerable para ampliar la vida útil de EVBC más allá de la estimación actual".
SUSPENSIÓN EN CARLÉS
Orvana tiene previsto, por tanto, reducir el ritmo de producción y dejar a Carlés en fase de mantenimiento a la espera de que mejore el plan económico para la minería o que aumenten los precios de los metales. Además de ejecutar el nuevo plan de optimización, que ya ha mejorado los resultados en los últimos meses, la Compañía también está estudiando otras alternativas. Entre ellas se encuentra evaluar áreas limitadas de alta ley en la mina de Carlés para aplicar métodos de explotación más adecuados así como nuevas exploraciones centradas en determinadas zonas y yacimientos secundarios en la región.
