Oviedo.-El portavoz de Sanidad de FORO, ha denunciado que “la Consejería de Sanidad ha anunciado que debido al volumen de las listas de espera para scanners (TAC) y resonancias magnéticas (RNM), se ve obligado a volver a utilizar los aparatos que había dejado abandonados en el viejo hospital de El Cristo, es decir, después de gastarse 400 millones de euros en el nuevo HUCA, el Consejero de Sanidad tiene que volver a abrir el hospital viejo porque ‘el hospital del siglo XXI’ es insuficiente”.
Señala Longo que “cuesta trabajo imaginar que cálculos habían hecho el Consejero de Sanidad y el Gerente del SESPA cuando ordenaron el traslado al nuevo HUCA de La Cadellada. Era evidente que la lista de espera de TAC y RNM iba a crecer porque en el nuevo HUCA hay menos equipos que en el viejo. Era algo que se sabía pero parece que les ha cogido de sorpresa”.
“Si además el Consejero se empeña en que los radiólogos no hagan horas extraordinarias pagadas”, añadió, “y tampoco quiere derivar pacientes a los hospitales ‘con ánimo de lucro’, el resultado que se obtiene es un aumento de las listas de espera. No hay que ser un experto en gestión sanitaria y petroquímica de la talla de su asesor Rodriguez-Vigil para entenderlo”.
“Como los médicos saben lo que hay, cada vez que piden un TAC o una RNM a sus pacientes las solicitan como preferentes o urgentes porque si las solicitan como ‘no urgentes’ tardarán más de un año en hacer la prueba. Ahora incluso las peticiones preferentes tiene que esperar medio año”.
Apunta el diputado que “en un inusitado arranque de sensatez, los directivos de la sanidad asturiana han decidido que vuelvan a utilizarse las instalaciones de TAC y RNM que habían quedado abandonadas en el viejo HUCA pero se han encontrado con la desagradable sorpresa de que para ponerlas de nuevo en funcionamiento tiene que hacer una serie de arreglos que durarán un mes. Los aparatos que quedaron en el viejo HUCA están deteriorados y no podrán volver a usar se hasta octubre ¿Que ha pasado para que unos equipos que funcionaban perfectamente en mayo necesiten unas reparaciones tan importantes?”.
“En estos momentos lo único positivo que se puede decir del mandato de Faustino Blanco es que solo faltan 10 meses para que termine la legislatura y deje de sembrar el caos en la sanidad asturiana cuya calidad asistencial está cada día más deteriorada” concluyó.