10 años después, España pierde un campeonato tras empatar 6-6 ante Portugal, mientras que Italia se colgó un oro europeo 24 años después

Algún día tenía que llegar. La mejor selección de hockey sobre patines de todos los tiempos ha conocido lo que no es ganar un Campeonato más de diez años después. Esto no empaña en nada la brillante trayectoria de una selección que se ha ganado por méritos propios aparecer en letras de oro en los libros de historia.

Siendo rigurosos, la última vez que España no ganaba un Campeonato de Europa de hockey  sobre patines fue ya en el siglo pasado, en 1998. España ha terminado el Campeonato de Europa colgándose la medalla de plata, algo que no sucedía en un Campeonato de Europa desde ese preciso año.

Italia es la nueva campeona de Europa. Tras ganar a Francia en su partido (5-4), España necesitaba la victoria para ser campeona, pero acabó empatando ante una Portugal que supo aprovechar sus minutos de efectividad (6-6). La selección salió con garra, con ganas con la intención de sumar un nuevo título a su palmarés.

Sus intenciones se vieron frenadas por los dos goles portugueses, casi consecutivos, de Rodrigues y Barreiros. El primero cazó una pelota dentro del área y el segundo aprovechó un desmarque al segundo palo.

Las dos dianas lusas entorpecieron el ritmo de la selección, que poco a poco fue recuperando su mejor versión. Los de Paüls recortaron distancias gracias a un lanzamiento de falta directa, posterior a la tarjeta azul que vió Diogo. Gual no perdonó el tiro (1-2, min 9). Con el gol España empezó a acechar con más constancia la portería lusitana pero no acababa de encontrar los mecanismos necesarios para finalizar sus transiciones. El dominio español era total hasta el punto que mantuvieron la posesión con un ‘power play’ en contra durante los dos minutos enteros. Bargalló vió la azul por frenar una contra pero Malián paró la directa correspondiente.

Segundo acto de emociones y de infarto. España remontó hasta dos veces dos goles en contra (2-4 y 4-6). Primer Pedro Gil empató a dos, antes de las dos dianas portuguesas. En esta ocasión Diogo y Silva consiguieron superar a Malián. España reaccionó y con un gol de Costa y otro de Pedro Gil devolvieron la igualada en el luminoso. El quinto gol español se resistía y llegaron dos más portugueses: Viana, de falta directa, y Rodrigues.

Cuando parecía que la derrota consumiría los últimos compases, Pedro Gil demostró otra vez más su efectividad y empató con dos cañonazos (6-6, min 39). Sin tiempo para más, España no pudo conseguir el gol que les daría el Campeonato. Italia ya es la nueva campeona.