“Es una gran falsedad decir que estamos ante una propuesta liberalizadora cuando impone la creación de zonas o núcleos comerciales predeterminados, una medida propia del más rancio dirigismo económico”
- “En esta orgía normativa, equiparar a Gijón y Oviedo con Almería, Jerez, Marbella y otras capitales turísticas para ordenar un sector vertebrador de las ciudades es una chapuza propia de burócratas que desconocen la decadencia asturiana”
- “El progreso y la modernización del sector del Comercio asturiano no se promueve a base de imponer ocurrencias sino con medidas consensuadas entre los comerciantes, los consumidores y las administraciones local y autonómica”
- “El daño económico afecta a toda Asturias, y a otros sectores como el de los propietarios de bajos comerciales que pierden de la noche a la mañana su valor en un mercado ya de por sí deprimido”
El presidente de FORO, Francisco Álvarez-Cascos, tras reunirse en Oviedo con el presidente de la Federación Asturiana de Comercio en Oviedo y con el presidente de la Unión de Comerciantes en Gijón, manifestó en una rueda informativa ante los medios de comunicación que “el Presidente del Principado, Javier Fernández, lleva perdidos cuatro días sin reunirse con el Alcalde de Oviedo y la Alcaldesa de Gijón para impulsar urgentemente una respuesta legal y política común al disparate del caótico Decreto-Ley de Rajoy en el que, entre decenas de materias heterogéneas, cuela de rondón una norma improvisada sobre regulación de horarios comerciales en Asturias. Es una gran falsedad decir que estamos ante una propuesta liberalizadora cuando impone la creación de zonas o núcleos comerciales predeterminados, una medida propia del más rancio dirigismo económico”.
Álvarez-Cascos añadió que “no es serio legislar a golpe de Decreto-Ley por parte del gobierno de Rajoy, que ya aprobó 54 en esta legislatura, cuando se disfruta de mayoría absoluta y se llevan dos años y medio gobernando, ni es de recibo ensartar una ristra de disposiciones dispersas que hiere la sensibilidad de cualquier ciudadano respetuoso con el procedimiento legislativo tradicional. Estamos ante una la ensalada de ocurrencias que modifican 26 leyes y afectan a asuntos tan heterogéneos como los impuestos, el empleo, el cine, los transportes, los drones, los precios del gas, las prospecciones mineras, las titulaciones militares, el Registro Civil o la efeméride de la primera exposición de Picasso en La Coruña. En esta orgía normativa, equiparar a Gijón y Oviedo con Almería, Jerez, Marbella y otras capitales turísticas para ordenar un sector vertebrador y diferenciador de las ciudades es una chapuza propia de burócratas que desconocen la naturaleza de la decadencia asturiana, a los que no les importa nada agravarla confundiendo las raíces del problema y mezclando unas propuestas dirigistas improvisadas para ciudades españolas de características muy diferentes”.
El presidente de FORO concluyó afirmando que “el progreso y la modernización del sector del comercio asturiano, que está siendo castigado por la conjunción de todas las crisis sectoriales regionales, no se promueve a base de imponer ocurrencias desde Madrid, sino con medidas consensuadas entre los comerciantes, los consumidores y las administraciones local y autonómica. Resulta un sarcasmo que el Gobierno de Rajoy esté dando la espalda a la promoción turística asturiana y ahora invoque el turismo como argumento para destrozar la estructura comercial de nuestras principales ciudades. Pero el daño económico no afecta solo a Oviedo y a Gijón sino a toda Asturias, y a numerosos sectores conectados con el comercio. Por ejemplo, al sector inmobiliario y a los propietarios de bajos comerciales en Asturias cuyos locales se devalúan de la noche a la mañana en un mercado ya de por sí deprimido”.
