'Guerra' de consejeras por la prohibición a la flota cántabra de cerco en aguas de Asturias

Guerra de consejeras por la prohibición a la flota cántabra de cerco en aguas de Asturias

La consejera de Agroganadería mantuvo una conversación telefónica con su homóloga cántabra, a la que además respondió también por escrito

 

María Jesús Álvarez afirma que el asunto se debe reconducir en el ámbito de las cofradías de pescadores y que alentar la polémica no es la mejor forma de resolverlo

 

Asturias.-La consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, ante las declaraciones realizadas esta mañana por la consejera de Pesca de Cantabria, Blanca Martínez, en las que afirmaba que estaba esperando una respuesta sobre las autorizaciones de pesca para barcos cántabros en aguas interiores de Asturias, quiere aclarar que la consejera de la comunidad vecina tiene desde ayer conocimiento de la postura del Principado sobre ese asunto. Ayer miércoles, ambas consejeras mantuvieron una conversación telefónica y, además, María Jesús Álvarez también respondió por escrito a su homóloga cántabra.

 

Desde la Consejería de Agroganadería y Recursos Autóctonos considera que no hay que sobredimensionar el problema, ya que, tradicionalmente, desde el Principado se ha denegado las autorizaciones para la pesca del cerco en aguas interiores a todas las flotas del Cantábrico, desde Galicia al País Vasco, y tan sólo se hacía una excepción con cinco barcos de San Vicente de la Barquera.

 

María Jesús Álvarez ha recordado que las administraciones siempre han dado carta de naturaleza a los acuerdos entre las federaciones de cofradías de pescadores. Sin embargo, ha explicado que en esta ocasión no se ha producido ese acuerdo entre las cofradías de Asturias y Cantabria.

 

La consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos ha aclarado que su homóloga cántabra ya conoce que el Principado considera que es un asunto que se debe reconducir desde el ámbito de las cofradías y que alentar la polémica no es la mejor forma de resolverlo.

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