El Grupo de Delincuencia Económica de la UCO de la Guardia Civil, coordinado y dirigido por la Fiscalía Especial Contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada y el Juzgado de Instrucción nº 9 de los de Sevilla, ha procedido a la explotación de la segunda fase de la operación CIRENE, actuaciones decretadas secretas y en las que se investiga, entre otros delitos, un delito de fraude en subvenciones. En el día de hoy se ha detenido a 14 personas, 5 en Madrid, 1 en Jaén, 7 en Sevilla y 1 en Gran Canaria; habiéndose efectuado 6 registros, 1 en Madrid, 1 en Jaén y 4 en Sevilla. En el día de hoy y mañana los detenidos serán trasladados a dependencias de la Guardia Civil de Sevilla, para posteriormente ponerlos a disposición judicial.
La operación CIRENE de la Fiscalía Anticorrupción y la Guardia Civil, abarca el análisis de los fondos de formación otorgados, por la Junta de Andalucía, mediante subvenciones a distintos beneficiarios a lo largo de los últimos doce años, habiéndose realizado múltiples actuaciones como la incautación, el pasado mayo, de expedientes de justificación de subvenciones para formación, en la sede de la Dirección General de Formación de la Junta de Andalucía. El inicio de la operación se sitúa en el Juzgado de Instrucción SEIS de los de Sevilla en el verano de 2013, siendo dividida la causa posteriormente entre ese Juzgado y el número NUEVE, entendiendo este último de todo aquello relacionado con la organización sindical UGT-Andalucía.
En relación con UGT-Andalucía, el 19 de diciembre se procedió al registro de la sede de UGT-Andalucía. Acto seguido, el Grupo de Delincuencia Económica llevó a cabo diversas tomas de declaración tendentes a esclarecer los hechos investigados.
El análisis de la documentación incautada en diciembre, contrastado con las manifestaciones tomadas y otras diligencias practicadas, ha propiciado una acumulación de indicios sobre diversas personas como responsables, en distintos grados, de un delito de fraude de subvenciones. Las investigaciones han podido definir diversos métodos utilizados para desviar el dinero de las subvenciones a otros fines diferentes, en este caso presuntamente a una financiación del propio sindicato. Estos procedimientos eran ejecutados por personal que trabajaban para UGT-A, el cual sería dirigido por un responsable de la citada organización.
Se ha constatado que este fraude se realizaba de manera sistemática año tras año, siendo perfeccionado en el trascurso del tiempo. Se considera que la vía más importante en la financiación de este sindicato podría haber sido esta presunta práctica ilícita.
La operación sigue abierta y no se descartan más detenciones y registros.