Por Fernando Bazán
noticiasdesiria.blogspot.
El Departamento del Tesoro agregó al Banco Comercial, propiedad estatal de Siria, y a su filial con sede en Líbano -el Banco Comercial del Líbano- a su lista de sanciones, citando sus vínculos con las violaciones de los derechos humanos y al tráfico ilegal de armas con Corea del Norte. La David Cohen, Subsecretario del Departamento para Terrorismo e Inteligencia Financiera, indicó que la empresa de telefonía móvil Syriatel también fue incluida en el listado ya que está controlada por "uno de los miembros más corruptos del régimen, refriéndose al multimillonario primo del presidente sirio, Rami Makhlouf.
La acción congela cualquier activo que las empresas sirias tienen en las jurisdicciones de EE.UU. y la prohibición de los estadounidenses para hacer negocios con ellos. Las sanciones no tendrán un impacto económico inmediato ya que los EE.UU. han limitado en gran medida los lazos comerciales y económicos con Siria, pero comprometerá la reputación de las empresas y llevará a los gobiernos de Europa a promulgar duras penas a las personas y empresas cercanas al presidente Bashar Al-Assad.
El Departamento del Tesoro dijo que el Banco Comercial con sede en Damasco de Siria -que tiene alrededor de 50 ramas- "ofrece servicios financieros al Centro de Ciencia y Estudios de Investigación de Siria, así como al Banco Comercial Tanchon de Corea del Norte"; ambas instituciones habrían apoyado los esfuerzos de Siria y Corea del Norte para la propagación de armas de destrucción masiva, según el comunicado del Tesoro.
El Departamento del Tesoro dijo que el Banco Comercial con sede en Damasco de Siria -que tiene alrededor de 50 ramas- "ofrece servicios financieros al Centro de Ciencia y Estudios de Investigación de Siria, así como al Banco Comercial Tanchon de Corea del Norte"; ambas instituciones habrían apoyado los esfuerzos de Siria y Corea del Norte para la propagación de armas de destrucción masiva, según el comunicado del Tesoro.
El Banco Comercial de Siria ya estaba bajo sanciones de EE.UU. por lavado de dinero, pero ahora se suma la cuestión de la proliferación de armas de destrucción masiva, algo que le permitirá a la UE para designar al banco en su lista de sanciones. Esto sentaría las bases para la imposición de sanciones más amplias contra el sector de petróleo y gas; EE.UU. ha estado presionando a sus aliados europeos para que se sumen a prohibir la exportación siria de petróleo crudo que aporta un tercio de los ingresos del gobierno nacional. Sin embargo, el Reino Unido, en particular, se ha opuesto alegando preocupaciones que esto afectaría a la población siria.
El dato más importante es el trascendido que viene cobrando fuerza desde el martes sobre la posibilidad que Estados Unidos está analizando un llamado directo al presidente Bashar Al-Assad para que renuncie. Se sabe que los funcionarios de la Casa Blanca están más ansiosos para realizar el anuncio, mientras que el Departamento de Estado está siendo más cauteloso acerca de las consecuencias de que Al-Assad no atienda al llamado; fuentes del gobierno de EE.UU. dijeron que la medida se espera sea anunciada en los próximos días, después de consultas de funcionarios de EE.UU. y del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
El presidente Barack Obama y otros altos funcionarios de EE.UU., en mayo, ya había dicho Al-Assad había perdido su legitimidad como un líder y que o bien tenía que encabezar la transición a la democracia o salir del camino pero no se había pedido específicamente que renuncie. La nueva formulación en estudio, deja en claro que Al-Assad no puede ser un reformista creíble y debe dejar el poder.
Esta medida está reforzada por el llamado de hace 5 días, por parte del Departamento de Estado, a todos los ciudadanos de EE.UU. en Siria para abandonar el país inmediatamente, citando la actual incertidumbre y la volatilidad, como las protestas contra el presidente Al-Assad. El Departamento de Estado pidió a aquellos que deben permanecer en Siria a limitar los viajes no esenciales en el país.
El escenario se complica cada vez más para el régimen sirio. Aun suponiendo que no sea derrocado o que no se retire del poder -como lo vienen insinuando EE.UU.- el futuro del presidente Al-Assad va a girar entre ser un paria internacional, debido a las sanciones impuestas por la comunidad internacional; o una tiranía al estilo norcoreano, debido al deslegitimación sistemática y progresiva del régimen sirio al emplear la violencia para gobernar por el terror