Representantes del colectivo Marea Ciudadana de Asturias y de Movimientos de Confluencias harán entrega, a las 11 de la mañana de hoy, en el Parlamento asturiano de dos escritos en los que se solicita al Presidente del Principado que haga valer "el derecho de las asturianos a decidir sobre la forma de estado que quieren para su país".
En el escrito, los firmantes aseguran que "desde el movimiento ciudadano Marea Ciudadana y máxime desde que es conocida por todos la abdicación del Rey D. Juan Carlos, somos conscientes de la necesidad de dar respuesta a la petición multitudinaria de que se establezca un Plebiscito Ciudadano, en el conjunto del Estado Español, que sin duda será otro ejemplo cívico y pacífico de democracia directa, en el que se plantee a la Ciudadanía de este país qué tipo de régimen político desea.
Dado que existen dos opciones perfectamente definidas hoy en día: Monarquía o República y
ante la desmesurada atribución por parte del partido en el Gobierno, con la colaboración
innecesaria del Partido Socialista Obrero Español, de atribuirse la potestad de decidir el sistema
a implantar, en connivencia con los poderes fácticos de este país, la Marea ciudadana considera
absolutamente reprobable que tamaña decisión sea tomada sin tener en cuenta la opinión del
pueblo de España".
Al hartazgo de los ciudadanos y ciudadanas, expresado públicamente en los últimos meses de
diferentes formas y con movilizaciones diversas, por la falta de Democracia y de transparencia,
por la vulneración de nuestros Derechos sociales y ambientales; por la pérdida de los Servicios
Públicos, por la corrupción política, la deuda ilegítima y odiosa, los recortes, las privatizaciones
y por un sin fin de despropósitos más, que seguro son de su conocimiento, se une ahora la
decisión de un grupo de personajes ajenos al sufrimiento del pueblo de España de catapultar
a la sucesión en la Jefatura del Estado, por la vía del derecho de sangre, nada constitucional,
arcaico e inaceptado por buena parte de la ciudadanía, al hasta ahora Príncipe, el cual
carece de la legitimidad y el refrendo de la población.
Allá por los años 70 se agotó, (aunque no del todo), un tiempo de oscuridad y la ilusión hizo
que el pueblo de España aprobase todo lo que, aparentemente, era bueno para salir al sol de
la libertad y dejar atrás épocas tenebrosas. De todos es sabido que la necesidad obliga y
en aquella ocasión el miedo a una posible vuelta atrás hizo que se aceptara la opción menos
mala, cual era una transición pacífica de la dictadura a una democracia con Monarquía
Constitucional incluida.
Cuarenta años después, los tiempos han cambiado y, sin olvidar los logros conseguidos,
crece en las calles, en las ciudades y en los pueblos el deseo de participar en las decisiones
políticas que nos atañen. Máxime si se trata de decidir quién ha de ser el Jefe del Estado.
Así, en un claro y constitucional deseo de practicar el derecho al ejercicio a participar en el
devenir del país y a responsabilizarse de las opciones tomadas, recabamos de Usted que, en
el ejercicio no menor del cargo de Presidente del órgano que representanta al pueblo de
Asturias y en aras a la vocación democrática que se le supone, eleve al Gobierno de la Nación
la petición del Pueblo de Asturias de la celebración de un referendum en el que se decida qué
tipo de sistema deseamos: República o Monarquía .
El Plebiscito habrá de dar una respuesta totalmente democrática a la opción que resulte de
las urnas, que resultará así plenamente legitimada.