La norma penaliza a los inversores en energías limpias y favorece a las compañías contaminantes
Según ha declarado el ministro de Industria, José Manuel Soria, la nueva retribución que recibirán las renovables dará una rentabilidad de un 5.8%, casi dos puntos menos que los 7.5% del borrador original del Real Decreto, con lo que se pretende, "dotar de certidumbre al sistema y ofrecer unos incentivos a las empresas".
"Esta nueva normativa supone cambiar las reglas en medio del juego. Las personas y empresas que decidieron hacer inversiones en energías renovables lo hicieron bajo el amparo de unas normas en vigor que ahora de pronto ya no existen", ha declarado Marina Bevacqua, responsable de la Campaña de Energías Renovables de Greenpeace.
Este Real Decreto es una de las piezas más importantes de la Reforma del sector eléctrico sobre la que el Gobierno trabaja desde hace más de un año, la cual perpetúa un modelo obsoleto basado en los combustibles fósiles y la peligrosa energía nuclear, además de frenar las energías renovables y la generación y uso eficientes de la energía, tal como exigen las grandes compañías eléctricas.
Greenpeace considera que es necesario seguir trabajando para defender las energías renovables, al ser estas un elemento central del nuevo modelo energético que se necesita para salvar el clima.